El Extranjero
Cuba busca Récord Guinness por canchánchara gigante, su coctel más antiguo
Esta bebida, que data de la época colonial, era preparada y consumida por los mambises y está considerada como uno de los cocteles más auténticos de Cuba
TRINIDAD, Cuba. En busca de un Récord Guinness, músicos, artistas, glorias deportivas y personalidades de la cultura cubana elaborarán la canchánchara más grande del mundo, uno de los cocteles tradicionales más antiguos de la isla.
Esta bebida, que data de la época colonial, era preparada y consumida por los mambises y está considerada como uno de los cocteles más auténticos de Cuba. Se prepara a partir de una mezcla de miel de abejas, aguardiente, hielo, jugo de limón y agua.
En sus orígenes, se bebía en forma de tizana y daba fuerza a los mambises cubanos para combatir durante las guerras de independencia.
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En la ciudad de Trinidad, villa declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco hace 35 años, situada en la provincia Sancti Spíritus, en el centro del país, miles de personas se dieron cita en la plazuela El Jigüe, sitio fundacional de la urbe, para presenciar el acontecimiento durante la tarde noche del pasado viernes.
La canchánchara de alrededor de 200 litros, con la que se pretende establecer el récord, fue elaborada en una enorme vasija de barro de igual nombre, confeccionada por los Santander, una familia de artesanos trinitarios con siglos de tradición en la alfarería.
Daniel “Chichi” Santander, uno de los artesanos alfareros más longevo y tronco principal de la familia, fue el responsable principal de moldear y hornear el recipiente para la competencia internacional.
Anteriormente, en 2014, durante las celebraciones por el medio siglo de la fundación de Trinidad, en la ciudad se había elaborado una vasija con capacidad para 500 cancháncharas, pero la actual duplica esa capacidad.
“Esta vasija tiene una capacidad para unas 1.000 cancháncharas“, comentó el alfarero a Xinhua, mientras supervisaba la elaboración del cóctel gigante.
Santander explicó que ese “vaso regordete” es ideal para degustar la bebida y que “sabe diferente cuando la mezcla se revuelve y entra en contacto con el frío de la arcilla”.
Antes la bebida se tomaba en jícara (una vasija hecha con el fruto del árbol de Güiro), pero desde hace alrededor de 30 años los Santander, dueños del reinado del barro en Trinidad, idearon y confeccionaron la actual vasija, que tomó el mismo nombre que el cóctel.
Ante los ojos de los curiosos espectadores, deportistas, músicos, actores y personalidades nacionales y locales colocaron indistintamente los ingredientes dentro de la enorme vasija, para de esta forma dejar elaborado el cóctel gigante.Lee:
La degustación por visitantes y trinitarios de esa canchánchara, que busca convertirse en la más grande del mundo, marcó el inicio de la primera edición del Festival Canchánchara, Cultura y Tradición, que hasta el domingo acogerá galas y conciertos de populares artistas cubanos en Trinidad.
El evento coincide con el inicio de la temporada alta del turismo internacional en Cuba y busca reposicionar las atracciones turísticas de la también conocida como Ciudad Museo del Caribe.
“No es un evento más, sino un lazo necesario para la identidad, patrimonio e idiosincrasia cubana, porque representa la imagen de la nación”, aclaró José López Santander, promotor del evento, a varios medios nacionales y extranjeros.
Igualmente, se enmarca en las actividades por los 510 años de la fundación de Trinidad.
La celebración invita también a disfrutar de exposiciones de artes visuales, espectáculos humorísticos, lo mejor de la gastronomía y la creatividad de los pobladores, entre muchas otras propuestas que integran cultura, patrimonio e identidad.
“El que venga a Trinidad y no consuma canchánchara es como si nunca la hubiera visitado”, declaró a Xinhua Alberto González, un trinitario de 48 años.
Muchos consideran que el trago se ha convertido en un valor añadido del lugar, que otorga una dimensión cultural extraordinaria a la tercera villa fundada por los españoles en Cuba, además de sus atributos turísticos.
Yordanis Fernández, delegado del Ministerio del Turismo en Sancti Spítirus, explicó que el Festival pretende reverenciar “lo más representativo de una ciudad que atesora valores únicos“.
“Esta celebración realzará el cóctel y la herencia mambisa de las gestas de independencia”, aseguró al inaugurar el evento.
Magda Hernández, una vendedora de artesanías de 54 años, comentó que la ciudad está activando nuevamente su vida cultural y económica luego de varios años de baja turística por la pandemia y se mostró esperanzada de que eventos como este atraigan a más visitantes foráneos.
“Trinidad es una ciudad de ensueño, ya se está viendo nuevamente su despertar en el número de visitantes nacionales y extranjeros que están llegando cada día”, afirmó Hernández.
Lisandra Cots / Xinhua
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