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La Opinión

Ucrania, sin esperanza alguna  

Ucrania se volvió en el campo de batalla del mundo; en el área de prueba para nuevas armas, para desnudar o no la debilidad militar de Rusia

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Prácticamente todos los foros internacionales se pronuncian en contra de la invasión de Rusia a Ucrania que ya lleva más de 14 meses de combates, apoyo de Occidente va y viene, incluso ese conflicto ha destapado a nuevos filtradores de documentos secretos en Estados Unidos, pero una solución para el país de la desaparecida Unión Soviética no se vislumbra por ningún lado. 

Reunidos en la exclusiva estación de esquí de Karuizawa, a 100 kilómetros de Tokio, Japón los ministros de Relaciones Exteriores de los principales países industrializados (G7) dedicaron buena parte de sus discusiones al ascenso de China y reiteraron su apoyo a Ucrania frente a Rusia, pero son pronunciamientos que en el campo de batalla no tiene eco. 

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La guerra y sus atrocidades siguen su marcha imparable, incluso organizaciones de mercenarios empiezan a destacarse como héroes, como es el acaso del Grupo Wagner, quien casi todos los días presume sus triunfos en Ucrania e incluso lanza fuertes críticas a las tropas rusas por “lo mal preparadas que se encuentran”. 

El mismo ministro ucraniano de Relaciones Exteriores, Dmytro Kuleba, expresó recientemente su escepticismo sobre las posibilidades de éxito de los esfuerzos de paz en el conflicto con Moscú y afirmó que “Rusia quiere la guerra”, y no está alejado de la razón, porque el presidente Vladimir Putin no se puede dar el lujo de perder en esta invasión, eso representaría su caída del poder. 

Putin tiene proyectado –de entrada– permanecer en el Kremlin al menos, hasta 2036, pero las cosas no han salido como él esperaba, Occidente en esta ocasión no dejó que sucediera como pasó, en 2014, con Crimea que le fue arrebatado a Ucrania vía fast track, en esta ocasión Washington y sus aliados de la OTAN han empleado todo tipo de recursos para frenar a Moscú. 

El asunto es que Ucrania se volvió en el campo de batalla del mundo; en el área de prueba para nuevas armas, para desnudar o no la debilidad militar de Rusia; para acelerar el ingreso de nuevos países a la OTAN; pero también ha obligado a China a fijar una postura abiertamente a favor de Putin con apoyo económico y posiblemente militar, todo esto con un alto costo humano de unos 8 mil 500 civiles muertos y más de 8 millones de desplazados. 

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No se diga en el plano militar, los fallecidos en ambos bandos ya rebasan los 300 mil soldados, un cementerio de tanques, una destrucción importante de la  infraestructura ucraniana y un alto riesgo de las plantas nucleares de uso doméstico en esa nación, poco ha importado la mala experiencia que sufrieron con el accidente nuclear de Chernóbil. 

También, hay que dejar claro que esta guerra mundial disfrazada de conflicto bélico bilateral, ya tiene impacto en todo el mundo, por ejemplo, en el abastecimiento de granos, de energéticos, pero sobre todo, la vida de Europa dio un giro y resucitó el fantasma de las dos grandes guerras mundiales que ha padecido el mundo, no sólo eso, hoy mucha gente de Rusia repudia la invasión y lo expresa lo que le ha costado incluso la prisión. 

En el caso de las filtraciones Jack Teixeira, soldado de la Fuerza Aérea estadounidense, de documentos secretos del Pentágono sobre precisamente el conflicto en Ucrania, no es más que otra expresión de rechazo del conflicto bélico, hay un debate fuerte sobre quién debe o no tener derecho a ese tipo de información, pero ese no es el problema, sino cuáles son las razones de evidenciar los secretos de su nación, en conciencia de que el castigo será alto. 

Teixeira, quien inicialmente fue descrito por The New York Times como un aficionado a los videojuegos que tenía un grupo privado en la plataforma Discord, es sospechoso de filtrar documentos clasificados que pusieron a temblar a la comunidad de inteligencia, tensaron relaciones de Estados Unidos con gobiernos extranjeros y pusieron en peligro la información valiosa sobre la guerra de Rusia en Ucrania, esa acción también tiene otra lectura no hay potencia mundial que pueda tener completamente resguardados sus secretos.  

El espionaje en estos momentos juega un papel primordial para la hegemonía mundial, que se disputan Estados Unidos y China, principalmente, porque los días de gloria de Rusia están en el baúl de los recuerdos; Francia, Alemania, Reino Unido y Japón son sólo satélites de EU; naciones como Irán o Corea del Norte sólo patalean para conseguir recursos económicos que les permita seguir flotando. 

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En el caso de América Latina, una vez más desaprovecha las oportunidades económicas que le planta el conflicto bélico, muchos mandatarios actúan con políticas rancias, que ya no van acorde con los nuevos tiempos y eso les cierra y les quita muchas oportunidades de crecer económicamente. Están más preocupados por mantenerse en el poder o dejar a sus títeres en turno para seguir gobernando. 

En la región los únicos que aprovechan son los grupos delincuenciales, con el tráfico de drogas o de migrantes. Ellos son los que controlan los hilos del poder en muchos de los países latinoamericanos, para ellos que la guerra siga viva les ayuda a distraer el foco de atención mundial para sus diversas fechorías. O usted ¿qué cree?  

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