Donald Trump está lleno de problemas

Hay muchos registros de cómo el presidente de Estados Unidos, Joe Biden (81 años de edad), muestra indicios de mala memoria, incluso el Partido Republicano ha utilizado ese argumento para desacreditarlo en su cargo y posible reelección, pero el expresidente Donald Trump (77 años de edad) no canta mal las rancheras, en un reciente discurso se refirió a su esposa Melania como Mercedes.

Trump está en medio de una tormenta mediática y en el ojo del huracán porque es el favorito para ser el candidato republicano a la Presidencia estadounidense, pero a sus espaldas carga con cuatro juicios y 91 cargos, él acusa una cacería de brujas, pero no ha podido comprobar que no tiene nada que ver con lo que se le acusa, a todo eso se suma una crisis de demencia, según los especialistas.

Lee: No se puede cerrar la frontera entre México y Estados Unidos como dice Trump: AMLO

Mientras hablaba en la Conferencia de Acción Política Conservadora, Trump dio una gran ovación a su esposa y luego supuestamente se refirió a Melania como “Mercedes”. Él dijo: ‘Oh, mira ese Mercedes, es bastante bueno’. Más tarde, se dijo que en realidad se refería a su exdirectora de comunicaciones estratégicas de la Casa Blanca, Mercedes Schlapp. Pero ya sabe que cuando el río suena agua lleva.

Por el lado de la popularidad, Trump recibe puras buenas noticias, el pasado fin de semana dejó casi herida de muerte electoral a Nikki Haley, quien perdió en Carolina del Sur, o sea en su propia casa, y la verdad sea dicha las posibilidades de que pueda remontar son mínimas a no ser que algunas de los juicios determinen inhabilitarlo, eso sería como un golpe de muerte para el magnate que de llegar a la Presidencia podría escapar a todas sus acusaciones.

Aunque la situación se presenta como favorable, incluso para que el magnate gane la elección presidencial, las cosas en un segundo plano no son tan favorables para Trump, porque tiene asegurado el voto de la ala radical de derecha, pero falta que se gane la simpatía de los menos radicales y los indecisos, que no son pocos y que no lo quieren ver otra vez como Presidente.

En Mazatlán se incrementa 17% el flujo de pasajeros vía aérea en enero

Leer más

El PRI exige a la Secretaría de Economía defender al acero mexicano de las denuncias interpuestas en Estados Unidos

Leer más

AMLO visita Badiraguato para atender necesidades: José Paz López Elenes

Leer más

El gobierno de Mauricio Kuri mejora el transporte en cinco municipios de la sierra queretana

Leer más

Turismo no se ve afectado por inseguridad y deficiencias de movilidad en Tijuana: Cotuco

Leer más

El exmandatario también tiene que amortiguar los fuegos que se presentan al interior de su partido, ahí las cosas no pueden ser de otra manera sólo como él las decide, ya vio usted en la Cámara baja como la ala radical se ha negado a aprobar el presupuesto de ayuda para Ucrania, 60 mil millones de dólares, además echaron para abajo la propuesta de reforzamiento en al frontera, no importa si el plan era bueno o malo no era de Trump y con eso fue suficiente.

Por lo pronto, la presidenta del Comité Nacional Republicano, Ronna McDaniel, dejará su cargo el 8 de marzo, tras verse obligada a dejar el liderazgo nacional del Partido Republicano conforme el expresidente Donald Trump avanza hacia otra candidatura a la Presidencia y reafirma, como le decía, su control sobre el partido.

McDaniel anunció su decisión en un comunicado. “He decidido renunciar en nuestra Formación de Primavera el 8 de marzo en Houston para permitir que nuestro candidato elija un presidente de su elección”.

“El CNR ha experimentado cambios en el pasado una vez tenemos un candidato, y siempre ha sido mi intención cumplir esa tradición”. La medida no fue una sorpresa. Trump anunció a principios de mes su preferencia por el presidente del Partido Republicano de Carolina del Norte, Michael Whatley, un político experimentado y poco conocido que en los últimos años se ha centrado en la idea de fraude electoral, para reemplazar a McDaniel. Trump también eligió a su nuera, Lara Trump, para que funja como copresidenta del comité.

McDaniel, de 50 años, era una firme defensora del expresidente y ayudó a remodelar el Partido Republicano a imagen de él. Pero los aliados de Trump la culpaban cada vez más por la derrota del expresidente en 2020 y por el fracaso del partido a la hora de cumplir con las expectativas en las elecciones de los últimos dos años.

Y como lo hizo en su primer mandato, Trump va a colocar a su familia en puestos clave, para que le cuiden las espaldas, aunque en la era de su post mandato, hijos, nueras y anexas andén de juicio en juicio por las irregularidades en las que les gusta incurrir, sino pregúntele a su hija Ivanka, que después del primer mandato de su padre puso distancia. ¿Por qué será? ¿Qué sabe?

Hay un temor que ha alcanzado niveles de histeria y que se está extendiendo entre los intelectuales en Estados Unidos, especialmente después de las victorias de Trump en las primarias de Iowa, New Hampshire y ahora en Carolina del Sur, se basa en la idea de que el expresidente, incluso si gana las próximas elecciones según las reglas democráticas, intentará tomar el poder dictatorial al regresar a la Casa Blanca.

Presentada por una coalición bipartidista de liberales y conservadores, la tesis de un “descenso irreversible a una dictadura” ha sido amplificada por Robert Kagan, un académico neoconservador que a menudo hace causa común con el Partido Demócrata sobre la llamada intervención militar extranjera liberal.

Después del artículo de opinión de Kagan en el Washington Post, The Week fue aún más lejos al publicar una ilustración de Trump, vestido con un uniforme militar con charreteras doradas y el puño derecho en alto, bajo el título “¿Dictador al acecho?” Puede ser que Trump esté en la antesala de la Casa Blanca, pero los que no lo quieren ahí están en una lucha abierta para que no suceda. O Usted ¿Qué cree?

Te puede interesar: Donald Trump va en un camino prometedor