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Baja California

Los migrantes piden pollos asados mientras esperan cruzar la frontera a Estados Unidos

Hay un campamento de casi 300 personas que esperan ser procesados por elementos de la Patrulla Fronteriza

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TIJUANA, Baja California. Mientras esperan cruzar la frontera hacia Estados Unidos, los migrantes instalados en campamentos requieren alimentarse y en muchos de los casos piden por aplicación la comida, que va desde pollos asados hasta pizzas.

Según Rodolfo Navarro, repartidor de plataformas como Uber Eats, además de los pollos asados, los migrantes piden mucha pizza, y rechazan otro tipo de comida como burritos o tamales.

“Piden viajes y traes viajes a ellos y te das cuenta que están aquí, no necesitas investigar y te llaman para que vengas. Viene uno ya, viene otro a dejar y se va haciendo la dinámica”, explicó sobre cómo llegan al sitio.

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Según el repartidor, de igual manera solicitan que les lleven pan blanco y jamón para prepararse alimentos, además de sodas de sabores.

Este sábado aún permanecen en el campamento alrededor de 300 personas, las cuales están a la espera de ser procesados por elementos de la Patrulla Fronteriza.

No se registraron movimientos extraordinarios en la Garita de San Ysidro o en el Chaparral, de grupos de migrantes que intentarán cruzar a la Unión Americana.

En ese punto de la línea fronteriza, Ángel y su familia dedicarán los próximos días a vender burritos y cobijas a los migrantes que permanecen en el campamento, para que puedan comer algo más que pollos asados.

Todos trabajan en Uber como choferes y al ver la falta de comida y agua para los migrantes, se lanzaron a la barda fronteriza a ofrecer los burros a un dólar y las cobijas a 15 dólares. Pero a quienes no puedan pagar se los regalan.

“Hay personas que se les acabó el dólar y tienen moneda de su país, moneda de la India, de Colombia, chinas, aquí no hay casa de cambio y no se las aceptamos, les regalamos el producto”, agregó Ángel.

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Una de las motivaciones que los llevó a hacer esta labor fue escuchar los precios excesivos que estaban pagando a las personas que estaban en el campamento.

Llevaban más de 300 burritos y bebidas como atole y champurrado, que eran muy solicitados por los migrantes que permanecen entre los muros fronterizos. Los migrantes únicamente reciben barras de granola por parte de la Patrulla Fronteriza.

Juan Miguel Hernández | El Sol de Tijuana

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