:)

Viajes360

El terno es el atuendo que le da identidad y cultura a Yucatán

La vestimenta del Pueblo Maya se vio modificada con la llegada del dominio español, quienes establecieron nuevas pautas que se adecuaran más a los ideales y normas que llegaban con el catolicismo

Published

on

MÉRIDA, Yucatán. Elaborar el terno, traje de tres piezas, toma unos seis meses, debido a que se trata de un trabajo completamente artesanal, pero portarlo vale la pena, sobre todo durante los eventos de gala regionales y en las danzas típicas que forman parte de las tradiciones de la entidad.

De acuerdo con la Secretaría de Fomento Turístico (Sefotur) de gobierno del estado, durante el Siglo XVI se realizó el proceso de conquista de la península de Yucatán, que trajo consigo a los colonizadores españoles, quienes quedaron fascinados con la belleza de la región y la excentricidad de sus pobladores.

Señala que uno de los detalles que más llamaron la atención de los españoles fueron las mantas tejidas por las indígenas mayas, que fueron consideradas como tributos para los encomenderos, quienes apreciaban la gran calidad de esas telas.

Lee: Las artesanías de Chiapas son un mapa de la diversidad del estado

Destaca que la vestimenta del Pueblo Maya se vio modificada con la llegada del dominio español, quienes establecieron nuevas pautas que se adecuaran más a los ideales y normas que llegaban con el catolicismo, logrando así, el mestizaje de ambas culturas, que se vio reflejado en diferentes aspectos de la vida diaria como la gastronomía, la música y la ropa.

En el caso de Yucatán, explica que el traje de las indígenas se le alargó la falda hasta los pies, al que se denominó “fustán”, que consistía en una larga enagua blanca de algodón ajustada a la cintura acompañado de una especie de camisa, sin formas ni pliegues, que caía sobre el fustán a la cual le llamaron “hipil” y sobre los hombros una solapa cuadrada llamada “jubón” que por el ancho de la prenda simulan unas mangas cortas, quedando los brazos desnudos y un escote en la parte de pecho.

La dependencia explica que a la unión de estos tres elementos se le conoce como “terno”, que con el paso de los años ha tenido diversas adaptaciones con elementos como rosarios de filigrana de oro, así como collares o cadenas de dos vueltas y largos aretes.

Sus bordados pueden ser geométricos, con figuras humanas, de animales o plantas, mismos que tienen un simbolismo distinto en cada comunidad indígena que lo usa, adicional a que estos resaltan sobre las telas revestidas con encajes y bellos accesorios que hablan de su origen mestizo.

Esta vestimenta, resalta la Sefotur, generalmente se porta durante los eventos de gala regionales y en las danzas típicas que forman parte de las tradiciones de la entidad.

Para adquirirlo, la mejor opción es la localidad de Kimbilá, perteneciente al Pueblo Mágico de Izamal, un espacio en donde las calles se tiñen de amarillo y emanan un encanto sin igual, además de recorrer el Convento de San Antonio de Padua que cuenta con el atrio abierto más grande de Latinoamérica y el segundo más grande del mundo,

Otra opción es “La blanca” Mérida, una ciudad que enamora a primera vista con calles llenas de color y de historia que han logrado perdurar en el paso del tiempo fusionando su cultura con la modernidad, dando paso a un oasis cosmopolita que invita a recorrer cada uno de sus rincones, incluyendo su gastronomía.

Lee: Querétaro es referente turístico en el centro del país: Adriana Vega Vázquez

Publicidad

Trends

Publicidad