Propuesta de Morena de cobrar un peso más de impuesto a refrescos golpea a los pobres: ANPRAC

La Asociación Nacional de Productores de Refrescos y Aguas Carbonatadas (ANPRAC) advirtió que la iniciativa de Morena de aumentar un peso adicional de impuesto especial sobre producción y servicio (IEPS) a las bebidas saborizadas afectará a los más pobres, así como provocará la pérdida de 20 mil fuentes de trabajo y no se reducirán los problemas de obesidad en México.

“Es claro y evidente que el impuesto aplicado a bebidas saborizadas es un impuesto a los pobres, ya que 57 por ciento  de lo recaudado lo han pagado los mexicanos con menos recursos”, según el organismo

Incrementar un peso a cada cajetilla de cigarros y litro de refresco, cerveza y alcohol, por concepto de Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS), propuso Alfonso Ramírez Cuéllar, presidente del Comité Ejecutivo Nacional (CEN) del partido Movimiento Regeneración Nacional (Morena).

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A propósito de la celebración ayer del Día Internacional sin Tabaco,  el ex presidente de la Comisión de Presupuesto de la Cámara de Diputado hizo énfasis  en que actualizar el IEPS, como ha promovido desde mayo de 2019.

Cuando presidía la Comisión de Presupuesto de la Cámara de Diputados dijo que un impuesto adicional a los refrescos “generaría recursos adicionales que se canalizarán a cubrir necesidades del sector salud y, en consecuencia, elevarían el bienestar de la población”

“Mediante este esquema, las personas que consumen estos productos realizarían una aportación adicional al sistema de salud pública por más de 72 mil millones de pesos, monto que, al sumarlo con las estimaciones contenidas en la Ley de Ingresos de la Federación 2020, darían como resultado un total de recursos superior a los 206 mil 500 millones de pesos”, comentó Ramírez Cuellar.

“Es tiempo de implementar acciones concretas que nos permitan mejorar nuestro sistema de salud pública y así acercarnos al estado de bienestar que tanta falta le hace al país”, señaló el dirigente de Morena.

Los afiliados a la ANPRAC manifestaron que apoyarán la implementación de programas con dimensión social del gobierno de Andrés Manuel López Obrador, con el fin de apoyar a las familias más pobres y la necesidad de captación de recursos públicos.

Desde hace seis años se han escuchado múltiples análisis de académicos, expertos, así como se le ha dado seguimiento a los datos oficiales del Inegi y la SHCP para entender cuál es el impacto del impuesto sobre las familias pobres en México, agregó.

El impuesto propuesto por Morena también provocaría un impacto negativo de 13 mil millones de pesos  a la cadena de valor de toda la economía nacional y a la agroindustria mexicana.

También, el gravamen provocará la pérdida de 20 mil empleos en la economía, lo que se traduce en un impacto en el bienestar de millones de familias mexicanas.

“No existe evidencia científica que confirme que el incremento de impuestos en las bebidas saborizadas contribuye de forma integral a mejorar los índices de sobrepeso y obesidad”, manifestó ANPRAC.

 Se comparte la postura del presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador y de diversos legisladores de no considerar el incremento de impuestos en este momento tan complejo para todos los mexicanos, manifestó el organismo.

Las bebidas saborizadas y los refrescos tienen una doble tributación, ya que pagan un peso de IEPS pagan y 16 por ciento de impuesto al valor agregado (IVA), según la Asociación. En suma hay una carga tributaria aproximada de 30 por ciento.

“Hoy, pagamos una cuota de 1.2616 pesos por litro de bebida saborizada y refresco, después de múltiples incrementos por inflación. Apenas en enero 2020 se actualizó 7.8 por ciento  adicional al 17 por ciento, ya incrementado en enero 2018”, expresó.

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De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS) el principal factor se debe principalmente a que las calorías que consumimos son mayores que las calorías que gastamos a través de actividad física.

“Las bebidas saborizadas refrescos representan sólo 5.8 por ciento de las calorías totales que consumimos diariamente los mexicanos”, agregó.

La Industria Mexicana de Bebidas está en la mejor disposición de colaborar con autoridades y la sociedad civil, en la integración de soluciones conjuntas que abonen al bienestar de la población mexicana.

“Estamos abiertos a trabajar junto con el gobierno federal en la construcción de un sistema fiscal progresivo, que incentive a la innovación y evite afectaciones a los sectores desfavorecidos”, concluyó la Asociación.