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Estas son las razones por las que el frío es necesario para el campo chihuahuense

Los dos cultivos insignia del estado de Chihuahua, la nuez y la manzana no son tan sensibles a las bajas temperaturas

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CHIHUAHUA, Chihuahua. Aunque uno de los grandes retos para la agricultura es superar los fríos que en la mayoría de las ocasiones afecta los cultivos, mermando con ello las cosechas, lo que sin embargo no pasa con algunas siembras en la entidad, como la nuez o la manzana, que requieren del frío para tener éxito.

El estado de Chihuahua tiene varias actividades comerciales relevantes, entre las que están la minería, el ganado, el sector industrial y por supuesto la agricultura, siendo este uno de los más afectados por el clima extremo de la región.

Chihuahua cultiva entre otras cosas chile verde, alfalfa achicalada y avena grano, frijol, avena para forraje, durazno, membrillo, sandía y maíz grano, pero dos de los más relevantes son la manzana y la nuez, la primera se concentra en la región oeste y la segunda en la este.

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En verano hay días en los que el termómetro no baja de los 40 grados en gran parte del territorio y por el contrario durante el invierno desciende hasta temperaturas bajo cero.

Contrario a lo que se puede pensar, el frío no es completamente malo para los cultivos, en especial para los más característicos de la región, la manzana y la nuez, necesitan un poco de bajas temperaturas para poder madurar.

Es por esto, que en especial la nuez, es cultivada en Chihuahua pues algunas regiones de México no ofrecen cantidad suficiente de frío, un reto para una zona con poca lluvia y escasa agua en general, pues el nogal es un árbol de alto consumo de humedad.

Además, la nieve suele ayudar al riego de los grandes cultivos como la nuez, además de en algunos casos puede ayudar a ser una capa protectora aislante del frío extremo.

Al contrario del granizo, pues este daña de forma directa los frutos, no por el frío que lo acompaña más bien por los golpes que pueden echar a perder sobre todo las manzanas. Así mismo las heladas pueden provocar efectos terribles durante el florecimiento del fruto.

Por otro lado, las temperaturas bajas pueden ayudar a la prevención de plagas, de las cuales tanto la manzana como la nuez pueden ser víctimas.

Según la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural menciona que para el correcto crecimiento del nogal deben evitarse lugares cuyas temperaturas primaverales puedan descender a menos de un grado Celsuis.

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La temperatura óptima para su desarrollo es de 19 a 29 grados, y necesita una precipitación media anual de 0 a 800 milímetros (mm). Durante la temporada de recolección es bueno que bajen las temperaturas, esto es justo para los meses de octubre y noviembre. Es por lo anterior que los cultivos se dan en la región de Delicias y Parral.

Según información de la Sader, la manzana también necesita una temperatura específica para poder madurar de mejor manera.

La Sader menciona que la temperatura óptima se encuentra entre los 10 y -10 grados Celsius en invierno, y entre 30 y 15 en verano, siendo en realidad más resistente a fríos extremos que a calor extremos.

Para los cultivos más sensibles al frío, normalmente son las semillas en germinación, plantas con poco tiempo y las flores, la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural aconseja:

Sembrar árboles alrededor del cultivo que pueden servir como cortinas rompe vientos; la incorporación de abonos orgánicos y verdes; cubrirlos con túneles plásticos o invernaderos y cultivar productos tolerantes a las heladas.

Además, se puede regar el cultivo inmediatamente después de la helada, y aumentar la temperatura a través de pequeñas fogatas, siempre con humo y no con fuego.

Isabel Velazco | El Heraldo de Chihuahua

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