La Opinión

Javier Milei tiene un proyecto a largo plazo

El libertario Javier Milei desembarcó en el escenario político argentino hace dos años al lograr una banca de diputado

Published

hace 7 meses

octubre 3, 2023

El candidato ultraderechista Javier Milei, favorito para ganar las elecciones presidenciales del próximo 22 de octubre, prometió en el pasado debate presidencial poner en 15 años a Argentina al nivel de Francia e Italia; con 20 años a la altura de Alemania; o de Estados Unidos, pero con 35 años de gestión; y por supuesto, de paso, acabar con la pobreza, dejando atrás más de 100 años de crisis económica.

Javier Milei, un economista de formación neoliberal, no considera en su propuesta que en los países que mencionó en su discurso, ninguno ha podido terminar con la pobreza. ¿Será que el cierre del Banco Central y de las “nefastas empresas públicas” son la solución? Y peor aún, nadie se había dado cuenta de esa fórmula.

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En otras palabras, tiene la varita mágica para cambiar el rumbo del país sudamericano en sólo tres lustros, pero además no sólo está proponiendo un cambio radical en el plano económico, sino también en el ámbito político, quiere quedarse en el poder hasta colocar a Argentina a la altura de Estados Unidos, eso según sus planes implica siete lustros.

Es verdad que él encabeza los sondeos de cara a las presidenciales, sobre todo, entre los jóvenes que vienen contemplando cómo se desploman sus planes de vida futura por la crisis económica, que desafortunadamente se ha venido agudizando tanto con la izquierda como con la derecha y la única beneficiada ha sido la corrupción.

El libertario Javier Milei desembarcó en el escenario político argentino hace dos años al lograr una banca de diputado, se presentó en el debate como un “especialista en crecimiento económico” que sabe cómo reducir los niveles de pobreza que afectan a más del 40% de la población y “exterminar la inflación”, que en términos anuales supera el 124%.

No es cosa menor, pero él sabe cómo revertir esa crisis sólo con un chasquido.

A tres semanas de las elecciones, Milei se ha comenzado a consolidar como el aspirante más fuerte, si las cosas siguen ese cauce podría alcanzar el 45% de los sufragios que evitaría una segunda vuelta en noviembre, la otra fórmula es que tenga al menos el 40 % de los votos y 10% de ventaja sobre su más cercano rival.

Milei acusa a la “casta” conformada por los políticos tradicionales argentinos, de haber hundido al país sudamericano y dice que tiene “el coraje” y la capacitación suficiente para terminar con los problemas económicos. Discurso que ha seducido a no pocos, que han renovado sus esperanzas en él.

Actualmente, El país sudamericano ha firmado con el Fondo Monetario Internacional (FMI) un programa crediticio en virtud del cual Argentina recibe 44,000 millones de dólares a 30 meses a cambio de que el banco central aumente sus reservas internacionales y el gobierno reduzca el déficit fiscal.

No hay que olvidar que esas negociaciones son las que tienen cuarteada la relación entre el presidente Alberto Fernández y su vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner, esa fractura ha sido oro molido para Milei, quien critica abiertamente las decisiones de este gobierno que no jala por el mismo rumbo.

Al igual que el brasileño, Jair Bolsonaro, Milei saltó a la fama en un momento de gran crisis económica en su país alcanzó su nivel más alto en más de 32 años, y los precios de los alimentos en particular crecieron un 15% respecto al mes anterior, según el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC).

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Y al igual que Donald Trump, Milei ha sabido canalizar el sentimiento de ira hacia una clase política que es percibida como distante e ineficaz. Al lema trumpiano “Drenar el pantano”, los seguidores de Milei gritan “¡¡Qué se vayan todos!!”, una expresión de furia contra los políticos de ambos lados del espectro.

Milei se presenta como el candidato de la renovación, una oferta que caló hondo en las primarias. Y toma bastante fuerza de cara a las presidenciales del 22 de octubre, incluso para ganar en una sola vuelta.

Estamos a sólo unos días de que Argentina vuelva a elegir quién se hará cargo del problema en la Presidencia para sacarlos adelante, la propuesta de Milei es muy seductora, pero también camina entre la utopía. O usted ¿qué cree?