:)

La Opinión

La otra cara de la crisis francesa  

el presidente de Francia, Emmanuel Macron, ha culpado a los medios sociales por la expansión de los disturbios y de la crisis francesa

Published

on

Una semana después de que estalló la ira contra la Policía de Francia por la muerte de Nahel, un menor de 17 años de edad, que fue asesinado por un oficial al negarse a respetar un control de tránsito, las cosas empiezan a tomar cauces diferentes, la revuelta y la crisis francesa está expresando tintes políticos y sociales fuera de lo convencional. 

La quema de autos, la ruptura de ventanas y los choques nocturnos contra la Policía, desafortunadamente son un parámetro normal entre los manifestantes civiles franceses que están en desacuerdo con alguna política o “injusticia” por parte de las autoridades o el gobierno. 

Lee: BBVA, Banorte y Santander fueron los bancos que más ganaron por las altas tasas de interés y comisiones en México

Pero, Jean Messiha, un exvocero del político ultraderechista Éric Zemmour, tomó la iniciativa de apoyar a la familia del policía que mató a Nahel y, al corte del lunes, había recaudado más de un millón de euros, puede ser mucho o poco dinero, aunque lo que vale la pena resaltar es que no toda Francia condena el proceder del oficial. 

También, que la ultraderecha en Francia está tomando mucha fuerza, como sucede en España, Italia o Hungría, y que una de sus principales características de este movimiento es que está en contra de los migrantes, por cierto la familia de Nahel es originaria de Argelia. 

En el sitio Leetchi, otro bote en apoyo a la familia del policía recaudaba por su parte casi 65 mil dólares, mientras que otro en apoyo a la familia de Nahel contaba con casi 218 mil. 

Por su puesto, los políticos no podían dejar pasar esa manifestación y la crisis francesa. Por un lado, la campaña de ultraderecha destaca que hay que “apoyar a la familia del policía de Nanterre, Florian M., quien hacía su trabajo y que está pagando un alto precio”. 

Pero por el otro, la creación y el éxito de esta recogida de fondos provocó la indignación de la oposición de izquierdas. La diputada Clémence Guetté denunció en su cuenta de Twitter “una indecencia y un horror absoluto”. 

“¿El mensaje? Vale la pena matar a un joven árabe”, condenó la eurodiputada francesa de izquierda Manon Aubry, que pidió la supresión del bote creado en el sitio Gofundme.  

GoFundMe es una plataforma estadounidense de financiación colectiva con fines de lucro que permite a las personas recaudar dinero para eventos que van desde eventos de la vida como celebraciones y graduaciones hasta circunstancias desafiantes como accidentes y enfermedades. Pero parece que en esta ocasión fue utilizada sin respetar esas reglas. 

Por su parte, el presidente de Francia, Emmanuel Macron, ha culpado a los medios sociales por la expansión de los disturbios y ha pedido a las familias que se responsabilicen de sus hijos adolescentes. El ministro de Justicia, Eric Dupond-Moretti, dijo a la radio France Inter que se procesaría a los padres que deleguen la responsabilidad “por desinterés o de forma deliberada”. 

Ese mensaje más que otra cosa, parece un grito desesperado de gobierno, no hay que olvidar que no hace mucho la gente estaba en las calles en contra a la reforma de pensiones del presidente Macron, eso ha provocado un rechazo a su gestión y por consecuencia su popularidad que está por los suelos, en 26 por ciento. 

Lo que es un hecho, es que la crisis no ha terminado lo evidencia el balance de la sexta noche, la del domingo al lunes: a pesar de bajó el número de detenidos a 157–significativamente menos que los 719 y mil 311 en las dos anteriores–, tres policías resultaron heridos, y se contabilizaron 352 incendios en la vía pública y 331 en vehículos y edificios, según un balance provisional del Ministerio del Interior.  

No se puede dejar de mencionar, que uno de los incidentes más graves ocurrió en una pequeña localidad en los suburbios de París, L’Haÿ les Roses, donde un coche se estrelló de madrugada del domingo contra la casa del alcalde y luego se incendió. 

La esposa y uno de sus dos hijos pequeños resultaron levemente heridos mientras que el edil, Vincent Jeanbrun, del partido de derecha Los Republicanos, estaba en el ayuntamiento para coordinar la respuesta a los disturbios. 

La ONU ha advertido de los “profundos” problemas de “racismo y discriminación racial” entre las fuerzas de seguridad francesas, unas consideraciones que el gobierno consideró “totalmente infundadas”. 

Lee: Las penitenciarias de Baja California tiene certificaciones internacionales por su alta seguridad: Marina del Pilar Ávila

La violencia y la ira de los jóvenes de los barrios populares recuerdan los disturbios que sacudieron a Francia en 2005, después de la muerte de dos adolescentes perseguidos por la policía. En otras palabras, la xenofobia crónica es una epidemia que está ganando terreno, no sólo en Francia sino en toda Europa. 

Claro que no es un mal que sólo afecte a esa parte del mundo, también en América Latina hace aire, México, Chile, Argentina y Brasil han dado muestra de ese padecimiento. Pero quizá donde esté más enquistado ese mal es en Estados Unidos, de hecho las precampañas republicanas están basadas en la xenofobia. O usted ¿qué cree?  

Publicidad

Trends

Publicidad