La industria del blindaje y seguridad privada están comprometidos con la legalidad de las empresas en México

Con la firma de un convenio de colaboración, la Asociación Mexicana de Blindadores de Automotores (AMBA) y Agrupaciones de Seguridad Unidas por México (ASUME) ratificaron el compromiso de promover la legalidad de las empresas de estos sectores, sin descuidar la calidad del servicio, porque “lo barato sale caro”.

En un comunicado conjunto, dieron a conocer que el acuerdo prevé impulsar la legalidad de las empresas participantes en la industria de la seguridad privada, la calidad de los productos y excelencia de los servicios prestados, así como implementar estrategias y acciones en conjunto.

Asimismo, participar en reuniones de colaboración, gestión e información con autoridades de los tres órdenes de gobierno, cámaras y confederaciones patronales.

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Esteban Hernández López, presidente de la AMBA, dijo que continuarán con las conferencias y capacitación a los asociados, la difusión y promoción de información en beneficio del sector de la seguridad privada, a fin de contar con los elementos suficientes y necesarios para cumplir con la profesionalización de la industria.

“Con este convenio, ratificamos el compromiso de la AMBA de promover la legalidad de las empresas proveedoras de blindaje automotor, sin dejar de lado la calidad pues no es un secreto que este sector aparecen y desaparecen blindadoras que dejan a su suerte a clientes que ante un atentando comprueban que lo barato sale caro”, expresó, tras mencionar que al menos dos docenas de estas empresas son irregulares.

Puntualizó que en la AMBA se busca la legalidad y buenas prácticas, así como enfatizar su colaboración con el gobierno y fomentar el cumplimiento con la sociedad y clientes en temas de seguridad y tranquilidad.

Para la asociación un buen blindaje automotriz prevé como variables la integridad balística, funcionalidad del vehículo y estética, aunque la primera es medular entre salir ileso de un ataque o perder la vida.

La AMBA representa más de 65 por ciento de los blindajes que se producen en México y junto con otros organismos ha elaborado un documento único donde se establecen criterios con los que debe contar un buen blindaje, entre los que sobresalen áreas básicas de cobertura que deben estar protegidas, sin aceptar blindajes parciales y siempre protegiendo en ángulos de ataque de 45 grados.

Por su parte, Armando Zúñiga Salinas, presidente de la ASUME (organización que aglutina a las principales asociaciones de seguridad privada del país especialistas en guardias y protección ejecutiva, rastreo satelital, electrónica, ciberseguridad y blindaje automotriz, entre otros), destacó que la industria de la seguridad privada es estratégica para el desarrollo económico del país y la pacificación que tanto anhela la sociedad mexicana.

En ASUME están las 30 asociaciones de seguridad privada más representativas de todas las modalidades que prevé el marco legal vigente y que aportan 1.6 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) y emplear a poco más de 600 mil personas en todo el territorio nacional.

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La asociación asume la seguridad privada en el México como “actividad esencial” durante la pandemia, pues fue la responsable de proteger la inversión y los activos de todas las industrias, además de ser estratégica para la seguridad en comercios y lugares públicos, y a las personas.

Aunado a esta colaboración, ambas organizaciones impulsan que el poder Legislativo siga adelante con la Ley General de Seguridad Privada y consolidar la creación de la Cámara Nacional de la Industria de la Seguridad Privada que representará formalmente a todo el ecosistema empresarial.