Es un hecho histórico la compra de la refinería Deer Park: AMLO

El presidente Andrés Manuel López Obrador informó que el gobierno de Estados Unidos ya autorizó la compra de 50 por ciento de la refinería Deer Park por parte de Petróleos Mexicanos (Pemex) a Royal Dutch Shell, lo que calificó como un hecho histórico porque los conservadores nunca quisieron invertir en refinerías.

“Ya autorizó el gobierno de Estados Unidos la compra de Pemex de la refinería Deer Park de Houston, Texas, a la empresa Shell, es una compra que hace el gobierno de México de una refinería”, dijo en su conferencia de prensa matutina en Palacio Nacional.

“Es una compra que hace el gobierno de México, de una refinería, es algo histórico, y esto pasó por una autorización del gobierno de Estados Unidos, el día de ayer ya se aprobó la autorización (…) Es una muy buena noticia”, dijo el primer mandatario en su habitual conferencia mañanera.

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El Ejecutivo federal agradeció al presidente estadunidense, Joe Biden, la confianza para que Pemex pudiera adquirir la planta en Houston, Texas, pues con esta operación se podrá mantener precios bajos en gasolinas, diésel, turbosina y otros petrolíferos.

López Obrador subrayó que con esta refinería, con la nueva refinería de Dos Bocas y con la coquizadora de Tula “estamos incrementando nuestra capacidad de refinación en alrededor de 700 mil barriles diarios”, a lo que se agregan 10 mil millones de pesos de inversión para la rehabilitación de las seis refinerías existentes.

De manera adicional, abundó, se está incrementando la producción y se espera que para el año próximo el país tenga una capacidad de 1.2 millones de barriles, más los 700 mil referidos para que en 2023 se produzcan en México todos los combustibles de consumo interno.

“Es un giro muy importante en la política petrolera”, aseguró López Obrador, tras resaltar que en México no se construía una nueva refinería desde hace 40 años, “siempre con la mentira de que no era negocio la refinación”.

Ahora vamos hacia la autosuficiencia para mantener sobre todo precios bajos en gasolina, diésel y otros productos, puntualizó.

A su vez, el canciller Marcelo Ebrard mencionó que fue la Comisión de Inversiones Extranjeras de Estados Unidos la encargada de revisar los documentos de Pemex para la adquisición y que determinó que “no hay preocupación de seguridad nacional que quedase sin resolver”.

En tanto, el director de Pemex, Octavio Romero Oropeza, aseguró que la compra de Deer Park resulta de la mayor relevancia porque “Pemex y México son dueños de la refinería”, y esto permitirá que los combustibles sean propiedad del pueblo para tener autosuficiencia energética.

Aclaró que los términos de la transacción no cambiaron y que “el valor de los activos de la refinería sigue siendo 596 millones de dólares, que equivalen a 50 por ciento de la deuda de la refinería, que es la participación de Shell”, lo que deja a la planta limpia de deudas.

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Destacó que por instrucciones del presidente López Obrador se liquidará la deuda de los otros 596 millones de dólares que corresponden a la mitad que le toca a Pemex por su participación del 50 por ciento, lo que significa que “la refinería tenía un adeudo equivalente a su valor por cerca de mil 200 millones de dólares”.

El director de Pemex dijo que el valor de la transacción por los activos por la refinería sigue siendo de 596 millones de dólares, equivalente al 50 por ciento de la deuda de la refinería que es la parte de Shell.

Precisó que la capacidad de refinamiento de Deer Park es de 340 mil barriles por día. Al estar ubicada en el complejo de Shell, ayuda para comercializar sus productos por buque, ducto y carro tren.

Previamente, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) anunció una inyección de capital de tres mil 500 millones de dólares del gobierno federal destinada a reducir la carga de deuda de 113 mil millones de dólares que tiene Pemex.

La compra del 49.005 por ciento de la refinería de Deer Park busca también aumentar la venta de combustibles de la empresa, pero no considera los costos aduanales y de logística propios de las importaciones, aunque sea de la misma empresa, además de que estará regulada por autoridades de competencia estadunidenses en un mercado en que podría resultar más rentable vender los productos que se refinen que traerlos a México para su comercialización.