Los detenidos y sus familias tendrán privilegios si informan dónde están los 43 normalistas desparecidos: AMLO

El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, hizo un llamado para que los detenidos por la desaparición de 43 normalistas de la Normal Rural de Ayotzinapa ofrezcan información veraz para dar con el paradero de los jóvenes.

“Y como hay nuevas detenciones, yo hago un llamado a los detenidos y a sus familiares para que ayuden a dar información veraz sobre los hechos y si ellos colaboran van a tener consideraciones de carácter legal”.

“Nos interesa a todos los mexicanos, a los papás y mamás de los jóvenes desaparecidos en Iguala, Guerrero, saber su paradero”, afirmó en conferencia de prensa en el Palacio Nacional.

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El ex jefe de gobierno de la Ciudad de México afirmó que se está llevando a cabo una investigación a fondo sobre la desaparición de los 43 jóvenes la noche del 26 de septiembre de 2014 en Iguala, Guerrero.

“Ya se pudo demostrar que a 200 y 300 metros donde decían que se habían quemado a los jóvenes se encontró un hueso, una parte de uno de los muchachos que pertenecía  a uno de los jóvenes de nombre Cristian”

“También sirvió para dejar de manifiesto que no fueron quemados en el basurero de Cocula como decía la llamada verdad histórica”, recordó el mandatario.

“No vamos a dejar de atender este asunto. Hoy en la mañana traté el caso, no es que ya pasó el aniversario el sábado y ya nos olvidamos”, afirmó el político tabasqueño.

El jefe del Ejecutivo comentó que se logró romper el silencio de los implicados en el caso.

“Se han girado órdenes de aprehensión, vuelvo a dejar de manifiesto que los detenidos puedan dejar de ser considerados como testigos protegidos, fue como un pacto de silencio para que no se hablara, pero ya se está logrando porque los detenidos están contando lo que sucedió”.

“Yo no sé qué llevó a quienes tomaron las decisiones a ocultar los hechos o de fabricar la llamada verdad histórica, debieron actuar con trasparencia, sin consideración para nadie. Es un absurdo el querer tapar las cosas”, destacó el fundador de Morena.

 El presidente de la República aseveró que no protege a nadie y menos a Omar García Harfuch, secretario de Seguridad Ciudadana de la Ciudad de México, quien de acuerdo con fue cercano a Luis Cárdenas Palomino, en la Policía Federal y estuvo aquella noche en Iguala.

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En la gestión de García Luna, Cárdenas Palomino fungió como director de operaciones regionales de la policía federal entre 2006 y 2012.

Ramón Pequeño García encabezó la división antinarcóticos de la policía federal, que supervisaba la Unidad de Investigaciones Sensibles (SIU) bajo la veeduría especial de la Administración para el Control de Drogas (DEA) de Estados Unidos, según un reportaje de ProPublica.

“Más que emitir un juicio sobre un servidor público, quiero dejar claro de que no hay protegidos, no hay inmunidad en la investigación que se está llevando a cabo de los normalistas desparecidos de Ayotzinapa”, señaló López Obrador.

“No estamos considerando proteger a nadie, siendo de la organización ni de institución gubernamental que sea”

“He sido muy claro en dar a conocer en que  las instituciones, en el caso del Ejército por ejemplo, en vez de debilitarse y si cometieron delitos que sean castigados conforme a la ley, lo importante es que en vez de debilitarse las instituciones se fortalecen actuando con la verdad”, expresó el mandatario.

El 26 de septiembre de 2020 se cumplieron 6 años de la desaparición de los jóvenes normalistas de Ayotzinapa, Guerrero.

El Fiscal General de la República, Alejandro Gertz Manero, afirmó que la detención y extradición de Tomás Zerón, quien actualmente se encuentra en caldead de prófugo en Israel, es vital para conocer parte de la verdad sobre lo que ocurrió esa noche en Iguala, Guerrero.

“Zerón se convirtió en el vocero oficial del gobierno federal y en el orquestador de estas falsedades, incluidas en la llamada verdad histórica”, declaró en conferencia de prensa.

Por ese trabajo, agregó Gertz Manero, el ex director de la AIC tuvo un pago, que consistió en más de mil millones de pesos del presupuesto de la PGR que pudo sustraer con la ayuda de cómplices otorgados por la misma dependencia.

“(Robó el dinero) con la anuencia de sus superiores como pago de sus infamias. La institución puso a su disposición a 50 agentes policiales y todo el aparato administrativo para cuidarlo y facilitarle ese saqueo”, concluyó sobre el caso de los normalistas desaparecidos.