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Política

Al ministro Juan Luis González Alcántara Carrancá debería darle vergüenza su salario de 700 mil pesos: AMLO

El debate en torno a los privilegios de la SCJN y los fideicomisos se centra en el alto salario de los ministros.

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No comparto el que se defienden privilegios de la SCJN, pero respeto que se manifiesten: AMLO

El presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) aceptó que las manifestaciones por la desaparición de fideicomisos de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) se dio en un marco de libertad, pero al ministro Juan Luis González Alcántara Carrancá debería darle vergüenza por los privilegios que gana.

Aunque el presidente no comparte la defensa de estos privilegios, resalta su respeto por el derecho de los ciudadanos a manifestarse.

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Durante una conferencia de prensa, el titular del Ejecutivo reconoció el valor de la libertad de manifestación al afirmar: “Están en su derecho. Ayer hubieron en la ciudad como tres, cuatro, cinco manifestaciones y todas se expresaron con absoluta libertad. Vivimos en un país libre, en un país democrático“.

La libertad de expresión y manifestación es un pilar fundamental de cualquier sociedad democrática. En este contexto, el derecho de los ciudadanos a expresar su apoyo a la SCJN es innegable.

El fundador de Morena subrayó su respeto por esta libertad al decir: “Acerca de esta manifestación, muy bien, tienen todo el derecho a expresarse, a manifestarse. Yo no comparto el que se defiendan privilegios, pero respeto los derechos que tienen de manifestarse“.

El debate en torno a los privilegios de la SCJN se centra en el alto salario de los ministros y su pertinencia en una sociedad marcada por la desigualdad económica.

El presidente expresó sus reservas sobre la defensa de estos privilegios al señalar: “No comparto el que defiendan privilegios, porque se me hace muy injusto. Si estuviesen defendiendo causas en beneficio del pueblo, pues entonces sí, todo mi respeto, toda mi admiración”.

López Obrador cuestionó abiertamente el salario de los ministros, que según él en algunos casos alcanza los 700 mil pesos mensuales, y destacó la disparidad entre estos ingresos y los salarios promedio de los mexicanos.

Por ejemplo, marcha un ministro que gana 700 mil pesos mensuales, le debería dar vergüenza, ¿qué sensibilidad puede tener una persona que supuestamente tiene como trabajo la impartición de justicia y gana un sueldo elevadísimo que insulta a la mayoría de los mexicanos que obtienen ingresos solo para lo básico?”, señaló.

Según su perspectiva, el salario promedio de los trabajadores de la economía formal inscritos en el Seguro Social es de 16 mil pesos mensuales. Esta brecha salarial plantea interrogantes válidos sobre la equidad en la distribución de la riqueza y el acceso a oportunidades en México.

El presidente también instó a reflexionar sobre la diferencia salarial y la justificación de estos privilegios al preguntar: “Y ese ministro que fue a manifestarse y los otros, 700 mil pesos mensuales. ¿Por qué tanta diferencia? ¿Por qué esos privilegios?”.

Quienes defienden los altos salarios de los ministros argumentan que se basan en la experiencia y responsabilidad que conlleva su trabajo. Sostienen que estos salarios competitivos son necesarios para atraer y retener a los mejores juristas y jueces, garantizando la independencia del poder judicial y la imparcialidad en la impartición de justicia.

Sin embargo, críticos de estos altos salarios ven la cuestión desde una perspectiva diferente. Argumentan que el salario de los ministros no se justifica dada la situación económica de la mayoría de los mexicanos.

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