La huapilla es una bebida hidratante que salió de Tampico y la huasteca para el mundo

TAMPICO, Tamaulipas. En el estado y en toda la huasteca hay una tradición en cuanto a las bebidas, pues junto con el agua de jobito, la huapilla es clásica, pues con su sabor dulce y ácido no solo refresca e hidrata, sino que también brinda un importante beneficio para la salud.

De acuerdo al Diccionario Enciclopédico de la Gastronomía Mexicana, la huapilla proviene del fruto de la bromelia pinguin, es de color amarillento, mide de dos a cinco centígrados de diámetro, y tiene el característico sabor agridulce que recuerda la piña.

Mientras en la zona sur del estado la huapilla se emplea para hacer agua fresca, en Nayarit se ha registrado que se prepara en dulce, por lo que se le coce en almíbar de piloncillo. En Veracruz, las comunidades totonacas elaboran tepache con el fruto de la bromelia.

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La bromelia pinguin florece de marzo a junio, es una penca con hojas espinosas, color verde con tonos rosados, en forma de roseta.

Según información de la Dirección General de Culturas Populares en su libro “Las flores en la cocina veracruzana”, la bromelia, también conocida como cardón, es empleada por las familias de la Huasteca como cerca viva, pero también es considerada maleza o monte.

“La flor de cardón tiene un sabor excepcional, apreciado por las familias campesinas y olvidado en las grandes ciudades”, señalan.

Añaden que día a día entran en desuso las recetas y conocimientos relacionados con el fruto de la bromelia, pues “la buena usanza culinaria ha sido olvidada por las nuevas generaciones”.

En Tampico un lugar que se ha dedicado a mantener la huapilla y con esto aliviar la sed de las tardes en el puerto, es Rafael Vidales Treviño, dueño y fundador de Huapilla El Paisano, que con más de 30 años en el negocio, conoce bien las propiedades de esta agua.

“Es un agua muy diurética, no es una medicina (…), pero le va a ayudar a que las vías urinarias se vayan limpiando y favorecen a que no haya tanto los calculitos que son tan molestos”, ha afirmado el señor Vidales Treviño.

Para que la huapilla libere todos sus beneficios, es necesario que esta bebida atraviese por un proceso de fermentación que puede tomar de 6 meses a un año, sumado a su método artesanal y libre de cualquier conservador o sustancia química.

Roberto González | El Sol de Tampico