Vladimir Putin se entrampa en su sueños expansionistas 

En la primera semana de la invasión de Rusia a Ucrania no fue favorable para el presidente Vladimir Putin, pensaba que iba a arrasar militarmente a los ucranianos y por consecuencia tomaría la capital Kiev, para poder echar del poder a su par Volodimir Zelenski, pero se topó con que no todos los ucranianos quieren el cobijo ruso.

La resistencia en Kiev destruyó la ofensiva disuasiva de Moscú para supuestamente otorgar independencia Lugansk y Donetsk (Donbás) y obligar al gobierno de Zelenski a retirar la idea de ser parte de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), después de tres días Putin propuso una negociación, bajo sus condiciones, aunque no pudo hacerse de Kiev.

La ofensiva militar rusa se topo con pared al interior de Kiev y con una ofensiva económica de Occidente o sea de la OTAN, que no puede intervenir militarmente en Ucrania porque no es un país miembro, pero si con sanciones monetarias a puntos estratégicos a Moscú, que ya le dolieron fuerte al gobierno de Putin, quien el fin de semana amenazó con usar su fuerza nuclear si continúa esta ofensiva no armada.

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De entrada, el lunes el rublo amaneció en mínimos históricos, el cierre de la bolsa de Moscú, una subida drástica de los tipos de interés… Estas son las primeras consecuencias, encabezadas por Estados Unidos, de las sanciones impuestas a la economía y las finanzas rusas. Se puede entender como un puntapié a los intereses de los oligarcas rusos y al mismo gobierno.

Lo siguiente es que esos oligarcas recojan sus bienes y se marchen para poner sus capitales a salvo, y por consecuencia, el gobierno de Putin se quedaría sin margen de maniobra para seguir abusando de sus vecinos militarmente, no importa que seas una potencia energética, si no hay quien te compre, y si no que Putin revise qué pasó con Irak y su líder Saddam Hussein.

Una de las últimas medidas puestas en marcha fue la congelación de una parte de las reservas de divisas del banco central ruso en el extranjero. Estas reservas suelen ser útiles cuando se pretende apoyar la moneda, lo que será ahora mucho más difícil. “El tamaño de las reservas determina la credibilidad a la hora de defender el tipo de cambio”, recordó Niclas Poitiers, investigador del Instituto Bruegel de Bruselas.

Las personas han perdido confianza en su sistema financiero”, agrega, lo que explica el desplome de la divisa rusa y los importantes retiros de efectivo de la población, esto le va a generar más problemas a Putin al interior de sus país, de por si, las manifestaciones en contra de la guerra ya son una muestra de ese desacuerdo, y no son menores, porque el fin de semana cinco mil rusos fueron arrestados.

El jefe del Kremlin no debe de peder de su margen de maniobra que los jóvenes no están de acuerdo en que se mantenga en el poder, en realidad de la Putin es una dictadura disfrazada de democracia e impuesta a base de atropellos en contra de sus opositores, periodistas y todos aquellos que no comulguen con su sueño expansionista. 

Para apoyar el rublo frente a las sanciones, Moscú prohibió a sus residentes transferir divisas al extranjero y los exportadores se verán obligados a convertir en rublos el 80% de sus ingresos obtenidos en monedas extranjeras desde el 1 de enero de 2022.

Las sanciones económicas también incluyen la congelación de activos bancarios y personales, la exclusión de determinados bancos de la red de intercambio interbancario SWIFT y el control de las exportaciones. Entre estas sanciones, algunas tendrán un efecto a corto plazo, como la congelación de activos de personalidades consideradas cercanas al régimen.

Otras, en cambio, tendrán un efecto a más largo plazo, como las restricciones a la exportación de componentes electrónicos, subraya Olivier Dorgans, abogado especializado en sanciones en el gabinete Ashurst.

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El Fondo Monetario Internacional (FMI), que en enero, antes de la invasión de Ucrania, apuntaba a un crecimiento de 2.8% en Rusia este año, advirtió el jueves de un “riesgo económico importante”, además al economía rusa de la gente de a pie no es tan boyante, sino todo lo contrario y esta política bélica va a empeorar las cosas, no lo dude.

Las sanciones podrían afectar al crecimiento ruso en 1 o 2 puntos del PIB, calculó la empresa de análisis Capital Economics, incluso antes de la congelación de los activos del banco central o la próxima exclusión de la red SWIFT.

También podría acelerar la inflación de unos 3 puntos, según la consultora.

El banco central ruso duplicó el lunes su tasa de interés de referencia, llevándola a 20%, con el consiguiente riesgo de desaceleración del crecimiento.

Los países occidentales aún tienen margen de maniobra. Después de haber anunciado que una serie de bancos rusos serían excluidas del sistema SWIFT, podrían optar por una exclusión generalizada. Sin embargo, esta opción es poco probable. 

Además, varios bancos podrían escapar a esa exclusión para preservar el suministro de energía a Europa. Pero según el diputado y economista europeo Luis Garicano, “las sanciones no valen nada si no nos atacamos a la energía”, que representa una gran parte del PIB ruso, de acuerdo con un texto que publicó la agencia francesa AFP.

Otra opción, según el economista y profesor de la Universidad de California Gabriel Zucman, sería apuntar las carteras de los magnates congelando más ampliamente sus activos en el extranjero. Desde el inicio del conflicto ruso, la estrategia ha sido concentrar al máximo los efectos de las sanciones en la economía rusa y minimizar los efectos en el resto del mundo.

Pero el conflicto provoca una subida de los precios de las materias primas, presionando las cadenas de producción internacionales, ya muy alteradas por la recuperación económica tras la pandemia. Las empresas industriales están sufriendo por ejemplo la subida de los precios de electricidad, y las compañías aéreas, la del combustible.

Ahora Putin se metió en un callejón sin salida, ya tiene a su país en una guerra que no salió como él quería y la economía de su país comienza a sentir los estragos del bloqueo occidental, como reacción a sus propósitos expansionistas, el problema es que el líder ruso sigue creyendo que Ucrania y Rusia son una sola, ese puede ser su talón de Aquiles. O usted ¿qué cree?