El Congreso Agrario Permanente rechaza el programa bracero del presidente de AMLO

Tras asegurar que los mexicanos que laboran en el campo representan 10.7 por ciento del sector primario, el Congreso Agrario Permanente (CAP) rechazó el ´programa bracero que el presidente Andrés Manuel López Obrador planteó a su homólogo de Estados Unidos, Joe Biden, para ampliar las visas de trabajo temporal en ese país.

Exigió al Ejecutivo federal dejar de promover programas binacionales y por el contrario, elaborar y ejecutar proyectos específicos que mejoren las condiciones de vida de 2.4 millones de jornaleros agrícolas que con sus familias suman 8.5 millones de personas quenes se ven obligados a emigrar.

También le demandó López Obrador dejar de actuar como “agitador social” y mejor trabajar para arraigar a los jóvenes campesinos y evitar su migración; impulsar programas orientados a la juventud campesina mediante esquemas de financiamiento, asistencia técnica, capacitación y apoyos al cultivo, producción y comercialización, medidas sanitarias, crédito sustentable y acciones de aseguramiento.

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El dirigente nacional del Congreso Agrario, José Luis González Aguilera, exigió a López Obrador “agarrar” su papel de Presidente y olvidarse de “pleitos callejeros” con reporteros o con funcionarios menores, y proporcionar las vacunas a los médicos, “a todo mundo, no nada más a quien usted quiera”.

A su vez, José Amadeo Hernández Barajas, dirigente de la Central Campesina Independiente e integrante del Congreso, destacó que el campo enfrenta condiciones desfavorables para su desarrollo económico y social.

“De ahí que preocupa el desmantelamiento institucional que el actual gobierno ha realizado so pretexto de la austeridad, el abandono en la seguridad y certeza jurídica en la tenencia de la tierra, la cancelación de programas productivos y de soporte a la producción de alimentos y al ingreso de los productores”, detalló.

Pero también, abundó, la falta de apoyo para tecnificar el campo y para enfrentar contingencias climatológicas, como la severa sequía y heladas que se viven en importantes zonas agrícolas del país.

“Nos preocupa un gobierno cerrado al diálogo, empeñado en desechar los programas productivos y apostarle únicamente al asistencialismo”, subrayó el integrante del Congreso Agrario.

Reclamó que la Secretaría de Desarrollo Urbano (Sedatu) tenga más de un año cerrada y los campesinos no puedan regularizar la tenencia de la tierra, incluyendo a quienes viven con sus familias en terrenos ejidales, comunales o en parcelas ejidales, sin tener ningún documento de titularidad de su vivienda.

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El campo, donde vive una tercera parte de la población y sólo se le asigna 5.0 por ciento del gasto total, enfrenta riesgos cada vez más severos y recurrentes por el cambio climático y urge programas para alcanzar una agricultura sustentable, agregó.