La Opinión

La OTAN está en medio de un polvorín

Un alto cargo militar de la OTAN instó a las empresas europeas a estar preparadas para un contexto de guerra y ajustar sus líneas de producción y distribución,

Published

hace 39 segundos

noviembre 26, 2024

Alfonso López Orrante

La Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) está en medio de una encrucijada, primero, porque el presidente ruso Vladimir Putin está echando toda la carne al asador para ver qué postura asume Donald Trump cuando tome el poder, el próximo 20 de enero, y segundo, porque necesita frenar las hostilidades bélicas de Rusia para evitar que tome tientes de índole mundial estimando que su principal aliado los puede dejar a su suerte.

De hecho, un alto cargo militar de la OTAN instó a las empresas europeas a estar preparadas para un contexto de guerra y ajustar sus líneas de producción y distribución, en consecuencia, con el fin de ser menos vulnerables al chantaje de países como Rusia y China.

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Y lo dice porque Moscú comenzó a utilizar misiles supersónicos, que pueden tener capacidad nuclear, según el Presidente ruso, son en respuesta a las armas estadounidenses y británicas que está utilizando Ucrania para defenderse de la invasión rusa.

Parece que, a Putin se le olvida que al principio de la guerra sus fuerzas utilizaron drones de manufactura iraní, que resultaban baratos y cómodos, siguiendo su lógica, Kiev está en su derecho de utilizar las armas de sus aliados, aunque hay que dejar muy claro que está guerra contra Ucrania ya se volvió una pesadilla.

El jefe del Kremlin calculaba que su invasión. 2.0 a Ucrania sería similar a la de 2014 en Crimea, solo que en esta ocasión los ucranianos estaban mejor preparados para revertir las aspiraciones expansionistas de Putin, quien argumenta que su meta es liberar a los ucranianos prorrusos de las fuerzas neonazis que encabeza Volodímir Zelenski.

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Aunque, sus verdaderas aspiraciones atraviesan por tomar el control de Kiev, que según Putin es la cuna de la cultura rusa, de ahí se despreció por Mijaíl Gorbachov quien instauró la Perestroika, que dio paso a la desintegración de la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS) y con ello se terminó la hegemonía rusa, que por cierto ya venía en decadencia.

Hoy, Putin busca revivir esos viejos tiempos y por esa razón la OTAN tiene enfrente un gran reto, que implica que esté bien preparada y equipada ante los amagos nucleares de un mandatario que ya no puede recular en Ucrania, hacerlo sería una señal de debilidad que no está dispuesto a tolerar ni a padecer.

La OTAN es una alianza de países de Europa y América del Norte cuyo objetivo es garantizar la libertad y la seguridad de sus miembros por medios políticos y militares. Este año celebró el 75 aniversario de su fundación por el Tratado de Washington de 1949. Hoy cuenta con 32 países miembro, por su puesto el líder es Estados Unidos.

Es por eso que Trump y Mark Rutte, secretario general de la OTAN, conversaron sobre los desafíos que enfrenta la alianza militar en materia de seguridad global. En su primer mandato, el republicano exigió con vehemencia a Europa aumentar su gasto en defensa y criticó el excesivo peso que tiene Estados Unidos en el presupuesto de la OTAN.

Además, durante la campaña, Trump puso en duda el apoyo de Washington a Ucrania, lo que ha llevado a los aliados de la organización a insistir en que el respaldo a Kiev en su defensa contra la invasión rusa es central para la seguridad europea y estadounidense.

Esta volátil situación está aderezada con la intromisión de Corea del Norte en Ucrania, a donde desplazó unos 10 mil soldados con la finalidad de respaldar a su aliado Rusia, eso ha provocado que Corea del Sur también aliste armas para apoyar en un principio a Ucrania, en medio de ese polvorín está la OTAN, que debe de dar pasos seguros ante la posibilidad cada vez más latente de extender esa guerra.

Los integrantes europeos de la OTAN han sugerido que si Trump toma distancia, ellos trabajarían solos, pero lo que sucede en Ucrania no se puede abordar por separado, porque como ya mencioné Putin no puede recular, la única salida para él es ganar o en todo caso quedarse con la zona ucraniana del Dombás, que por su puesto, Kiev no está dispuesta a entregar.

El asunto es que la invasión rusa de Ucrania en febrero de 2022 modificó por completo el escenario geopolítico, europeo y mundial. En junio de ese mismo año la OTAN invitaba formalmente a Finlandia y a Suecia a integrarse en la organización y poco más de un año después, en abril de 2023, Finlandia se convirtió en miembro oficial de la Alianza Atlántica, abandonando su tradicional política de no alineamiento.

Suecia, por su parte, tuvo un camino más complicado para incorporarse y no pudo hacerlo hasta marzo de 2024, después de que Turquía levantara el veto a su entrada en enero y Hungría en febrero del mismo año, ratificando en sus parlamentos nacionales el visto bueno a la adhesión.

La membresía de Finlandia en la alianza militar ha tardado poco en dar sus primeros frutos. Desde el pasado 4 de noviembre y hasta el 24, se llevó a cabo la operación ‘Frente Dinámico 25’ en el flanco oriental de Europa que abarca a Estonia, Alemania, Polonia, Rumanía y Finlandia. En la operación participan militares estadounidenses, británicos, fineses, franceses y suecos principalmente, aunque los 32 aliados han proporcionado personal en distintos servicios.

Además, también se ha dado a conocer que los países que integran a la OTAN ha duplicado y triplicado la compra de armas ante las amenazas recurrentes de Rusia, por eso los tambores de guerra en el Viejo Continente suenan cada vez más fuertes, ojalá y se puedan callar antes de que suceda lo que nadie quiere. O Usted, ¿qué cree?