La Riviera Maya es el paraíso secuestrado por el crimen organizado

Tras posicionarse deesde hace unos años como el paraíso del Caribe mexicano, actualmente en la Riviera Maya la violencia que ejerce el crimen organizado ha tomado como rehén el desarrollo de la zona.

Cancún, Tulum, Playa del Carmen, Isla Mujeres y Cozumel son algunos destinos que reciben cada año miles de turistas provenientes de todo el mundo, lo que ha generado un importante desarrollo en la zona, pero también atrajo al crimen organizado.

La enorme cantidad de comercios, turistas y la inagotable vida nocturna fueron el caldo de cultivo perfecto para actividades ilícitas como extorsión, narcotráfico y trata de personas.

En los últimos meses, la violencia en el caribe mexicano entró en un nuevo pico, que incluso ha llegado al interior de los hoteles y restaurantes de más alta categoría, provocando la emisión de alertas de viaje en varios países.

Además de las playas y la vida nocturna de la Riviera Maya, uno de sus principales atractivos son las zonas arqueológicas que se encuentran en la zona. Sin embargo, el 13 de enero de este año la zona ubicada en Tulum se convirtió en el escenario de una balacera que dejó una persona muerta y un menor de edad herido.

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Derivado del ataque, el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) anunció que el complejo cerraría sus puertas durante 24 horas, aunque al día siguiente abrió sus puertas.

Apenas una semana después, el 21 de enero, el caos invadió el complejo Xcaret, luego de que un hombre abriera fuego contra un grupo de personas que se encontraban en un restaurante.

Más tarde se dio a conocer que las personas ejecutadas formaban parte de un cartel con operaciones en Estados Unidos y Canadá, mientras que el móvil del homicidio sería una disputa entre grupos criminales.

Las imágenes del presunto asesino, captadas por la seguridad del complejo, se viralizaron rápidamente en redes sociales, donde los usuarios cuestionaban los protocolos de Xcaret, ya que el sujeto pudo ingresar con un arma de fuego, evidenciando que ni siquiera los desarrollos más lujosos están fuera del alcance del crimen organizado.

Pasaron cuatro días para el siguiente episodio sangriento en la zona; dos sujetos ejecutaron a Federico Mazzoni, el gerente del Mamitas Beach Club, adentro del establecimiento.

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La hermana de la víctima aseguró que el ataque en realidad se dirigía al dueño del establecimiento, y los relacionó con una denuncia que se había presentado previamente.

La Fiscalía General de Justicia de Quintana Roo dio a conocer más tarde que el grupo criminal Los Pelones sería el responsable de la ejecución de Mazzoni, mientras que relacionó la agresión con la venta de droga en la zona.

El primer mes del 2022 cerró con un total de 33 homicidios ligados al crimen organizado en el estado.

Casi un mes después de la ejecución en Mamitas, dos personas fueron asesinadas en el restaurante de lujo Art Beach, en Tulum, mientras el lugar se encontraba atiborrado de comensales.

Las autoridades informaron que las personas que perdieron la vida en el lugar estaban relacionadas con el tráfico de drogas y activaron un dispositivo de búsqueda para dar con los responsables. Un día después se detuvo al presunto sicario.

Uno de los giros más redituables para el crimen organizado, particularmente en destinos turísticos del calibre de la Riviera Maya, es el llamado cobro de piso, del cual son víctimas desde los taxistas hasta los establecimientos en las zonas más concurridas.

En la zona hotelera de Cancún o la Quinta Avenida, en Playa del Carmen, el cobro de este impuesto criminal asciende en ocasiones a decenas de miles de pesos.

Los taxista tienen que pagar para recoger pasaje en la zona hotelera de Cancún, o son forzados a vender droga; negarse significa correr el riesgo de ser ejecutados. En el caso de los comercios, la decisión está entre cerrar o cuadrarse, bajo la misma amenaza si se niegan o denuncian.

En el 2021 más de 300 comercios se vieron obligados a cerrar por el cobro del “derecho de piso” y unas 150 medianas empresas decidieron abandonar la entidad para trasladarse a otros lugares reveló Juan Jaime Minguer Cerón, presidente de la Canaco-Servitur.

De acuerdo con los servicios sociales y alertas de la Fiscalía General del Estado, Alerta Amber y Protocolo Alba de Quintana Roo, en lo que va del 2022, se han reportado más de 130 personas desaparecidas y poco más del 70 por ciento de ellas han desaparecido en la zona de Playa del Carmen y Tulum.

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Del 90% de las personas reportadas como desaparecidas en la entidad, la última vez que se supo de ellas fue en el corredor Cancún-Tulum-Playa del Carmen.

El entorno selvático, así como los asentamiento irregulares, la población flotante, y la actividad turística y del crimen organizado dificulta la localización de estas personas.

Derivado de la situación que se vive en el polo turístico, la Fiscalía, junto con fuerzas federales ha implementado fuertes operativos para controlar la actividad delictiva, lo que ha llevado a la detención de integrantes de cárteles con influencia a nivel nacional, como el Jalisco Nueva Generación o el de Sinaloa.

Víctor Flores / El Sol de México