Tampico le dará un segundo aire a sus antiguos edificios

TAMPICO, Tamaulipas. Esta ciudad cuenta con una gran riqueza natural y un vasto patrimonio arquitectónico que atraen la mirada de los turistas locales y foráneos propios y extraños, al convertirse en el imán del turismo nacional y extranjero, por lo que existe la intención de darles un segundo aire a los antiguos edificios.

Las administraciones estatal y municipal trabajan con el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) y los cuerpos académicos de la Facultad de Arquitectura, Diseño y Urbanismo (FADU) de la Universidad Autónoma de Tamaulipas (UAT) del campus Sur, en proyectos que permitan renovar estos edificios que datan de casi 100 años.

En la mayoría de las ocasiones se ha logrado de manera satisfactoria, como es el caso del quiosco de la Plaza de Armas, la Planta Hidros que terminó convirtiéndose en la Casa de la Naturaleza; la Casa Fernández que fue convertida en museo, sin olvidar la Presidencia Municipal de Tampico.

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El director de la FADU, Gildardo Herrera Sánchez, menciona que la Facultad cuenta con un cuerpo académico de más de 20 investigadores quienes de manera conjunta con sus alumnos se han encargado de desarrollar proyectos para la protección, conservación, restauración y recuperación de los monumentos y murales arqueológicos históricos.

“Hemos tenido presencia en el Fideicomiso del Centro Histórico que se dedicaba a revisar los edificios para darle nueva vida a aquellos que después de un minucioso análisis de investigación fueron considerados como rescatables”.

Herrera Sánchez recuerda que desde 1997 se creó el Fideicomiso Centro Histórico de Tampico (Ficehtam) con el propósito de restaurar las valiosas construcciones y dar al puerto imagen propia, así como un lugar en donde se pueda percibir la belleza de antaño.

Este contaba con un fondo manejado por la iniciativa privada que reunió recursos del gobierno del estado y de aportaciones de privados, así como de los mismos propietarios que pretendían rescatar aquellos edificios antiguos que le dieran una identidad a Tampico, respetando los diseños arquitectónicos.

Hay que señalar que de acuerdo a anteriores censos en la zona centro de Tampico existen más de 800 edificios que tienen un valor arquitectónico, de los cuales 230 forman parte del catálogo del INAH y esperan un plan de remodelación o simplemente el ser rescatados.

El secretario académico de la FADU, Edgardo Jonathan Suárez Domínguez, puntualiza que entre los inmuebles que podrían ser considerados para su rescate están:

El antiguo Hospital “Canseco” de Tampico; “Cielak”, que se encuentra en la esquina de las calles Emilio Carranza y Aquiles Serdán; el “Aragón”, ubicado en Díaz Mirón entre Isauro Alfaro y Aquiles Serdán; el “Llaca” edificado en Héroes del Cañonero entre Isauro Alfaro y Aquiles Serdán y La Quinta Rosarito.

Destacó que estos son parte de los patrimonios arquitectónicos edificados con que cuenta el puerto, pero al igual que ellos, se puede hablar de muchos inmuebles que guardan entre sus muros esa historia del progreso de los municipios de la zona conurbada.

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Siendo un claro ejemplo los edificios que se encuentran en la colonia Árbol Grande de Ciudad Madero, cuyos propietarios hacen lo humanamente posible para mantenerlos en buen estado y conservando la belleza que permanece hasta nuestros días.

Sin embargo, no todos los inmuebles considerados para una restauración de parte de organismos como el INAH y los gobiernos locales llegan a recibir ese nuevo aire, ya que, de acuerdo al arquitecto, se requiere la escritura del propietario, quien al fallecer de forma abrupta deja intestados los inmuebles, dejando a sus herederos sin poder reclamarlos y en otros casos aquellos que cuentan con la documentación en regla suelen no tener el porcentaje del recurso para dichos trabajos.

Suárez Domínguez agrega que la Facultad de Arquitectura, Diseño y Urbanismo cuenta con un cuerpo académico de investigadores que son requeridos para llevar a cabo proyectos de restauración, para lo cual se hace uso de los laboratorios que al estar a la altura de la UNAM brindan certeza al momento de dar el veredicto final.

“Estamos preparados para realizar cualquier análisis a los inmuebles considerados como patrimonio arquitectónico edificado, ya que se cuenta con un cuerpo académico de investigadores que en conjunto con la comunidad estudiantil hacen los levantamientos visuales, topográficos, estructurales y materiales para determinar si es factible su restauración”.

El director de la FADU, Gildardo Herrera Sánchez y el secretario académico, Edgardo Jonathan Suárez Domínguez, coincidieron en que todos los proyectos solicitados por los gobiernos municipales a la Facultad no llegan a cobrarse, debido a que se obtienen recursos extraordinarios federales por las investigaciones, las cuales llegan a ser publicadas.

“Uno de los objetivos de la Universidad es tener sujetos de formación y estos son los alumnos, quienes se involucran con los cuerpos de investigación que han sido fundamentales para llevar a cabo la restauración de los edificios históricos”.

Esto nos lleva a reconocer la gran riqueza natural y el vasto patrimonio arquitectónico edificado que se encuentra en la zona conurbada, que atrae la mirada de propios y extraños, al convertirse en el imán del turismo nacional y extranjero; por lo que cobra fuerza la necesidad de continuar rescatando esos inmuebles que guardan entre sus muros la historia y el progreso de Tampico, Ciudad Madero y la región.

Antonio Campos | El Sol de Tampico