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¿Sabes la causa del cierre del histórico hotel Caleta, en Acapulco?

Fue en las décadas de los 50 y 50 cuando el hotel Caleta se convirtió en ícono del gran turismo nacional e internacional

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ACAPULCO, Guerrero. Fue en las décadas de los 50 y 50 cuando el hotel Caleta se convirtió en ícono del gran turismo nacional e internacional, pero actualmente está abandonado, luego de que en 2016 cerró a la industria turística a consecuencia de una millonaria deuda económica que tenía por falta de pagos de impuestos ante la Federación y municipio.

Inaugurada en 1950, este sitio fue considerado como la mejor hospedería de la zona tradicional del puerto de Acapulco, debido al resplandor que está construcción de 150 habitaciones todas con vista al mar tenía para el gusto y disfrute de los miles de turistas de gran poder adquisitivo que llegaban a hospedarse en ese lugar.

Hoy en día y luego de la exitosa época que por varias décadas vivió no sólo en el ámbito turístico nacional e internacional, sino también en la llamada etapa del cine de oro sirviendo como lugar idóneo para realizar varias filmaciones de películas mexicanas como el llamado “Bolero de Raquel” que protagonizó el famoso mimo mexicano Mario Moreno Cantinflas.

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Dichas filmaciones en la época de los años 50 y 60, le dieron vuelta al mundo dando a conocer cada una de las instalaciones que tenía en ese momento este gran hotel Caleta ubicado en la parte alta de un peñasco frente a la Isla de la Roqueta, hoy en día está hospedería, se encuentra cerrado al turismo.

De acuerdo a la historia de propios trabajadores obreros pertenecientes a la Confederación de Trabajadores de México (CTM), que por varios años laboraron en dicha hospedería, como Carlos Alberto Espíritu del sindicato gastronómico, desde el 2020 este hotel cerró sus puertas debido a la crisis económica en la que entró luego de haber servido como un búnker para cientos de policías federales que llegaron al puerto para integrarse a las acciones de seguridad pública en la ciudad.

Los elementos de la Policía Federal, provocaron una deuda por hospedaje y alimentos que llevaron a la quiebra y al cierre del Hotel Caleta, por 25 millones de pesos que no cubrió el gobierno del estado y federal en turno a pesar de haber existido un acuerdo firmado.

Dos años después de haber sido inaugurado en 1950 y debido a la gran demanda turística que tenía, en 1952 el Hotel Caleta, entró a un nuevo proceso de construcción de 112 habitaciones más con vista al mar, por lo que se convirtió en una hospedería con un total de 262 cuartos, esto provocó que se realizaran más movimientos de contratación de personas, así como de un mayor ingreso económico.

Al aumentar sus espacios de hospedaje, el hotel Caleta incrementó su estatus turístico, debido a que no solo llegaba un turismo de una económica alta, sino también personajes la política y hasta de la farándula nacional e internacional Sofía Loren, Gary Coopers, Orson Welles, Susan Hayworth y Richard Windmark, quienes según los propios trabajadores reconocieron que estas estrellas quedaron impresionadas por el impresionante hotel ubicado en una de las mejores zonas turísticas de Acapulco.

Así como estrellas nacionales, como Julio Alemán, Mario Moreno Cantinflas, Agustín Lara, así como la misma María Félix quien también se hospedó por algunos días en este majestuoso hotel que fue el primero en Acapulco en contar con una alberca.

La deuda por 25 millones de pesos, que generaron durante su estancia los elementos de la Policía Federal, no sólo provocó el cierre de la hospedería, sino también un aumento en los adeudos que la empresa que lo administraba tenía por conceptos de impuestos como pago de predial al municipio y a la Federación.

En 2020, el ayuntamiento de Acapulco encabezado por la exalcaldesa Adela Román Ocampo, realizó un embargo del Hotel Caleta por un adeudo millonario por falta de pago de impuesto predial que tenía desde 2006, lo que equivalía en ese momento a 13 años sin pagar tal y como lo marca la ley de ingresos del municipio.

El inmueble, que contaba con dos restaurantes, grandes jardines y una alberca con capacidad para más de 100 personas, tiene una extensión total de 29 mil metros cuadrados, por lo que el adeudo por impuesto predial al gobierno de Acapulco es millonario.

Enrique Hernández | El Sol de Acapulco

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