Soberana II, la vacuna cubana entra en fase tres

Un equipo de científicos del Centro de Inmunología Molecular y el Instituto Finlay de Vacunas, ambos de Cuba, participan en el estudio de intervención (fase III) que comenzó hoy en la isla caribeña con el candidato vacunal Soberana-02 contra el Covid-19.

Alrededor de 150 mil trabajadores de la salud recibirán la vacuna Soberana 2, el antígeno experimental más avanzado de Cuba, informaron autoridades locales.

“Hoy Soberana-02, llega a los brazos de las mujeres y hombros de los trabajadores del Finlay. Ellos forman parte del ensayo de intervención recientemente aprobado”, anunció el grupo empresarial de las industrias Biotecnológica y Farmacéutica (BioCubaFarma) en Twitter.

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De acuerdo con Prensa Latina, la vacunación del personal médico voluntario se aplicará en instituciones de salud de La Habana, donde la última fase de ensayos de Soberana 2 se realiza desde el 4 marzo con 44 mil voluntarios.

El Instituto Finlay desarrolló este inyectable, primer producto del país caribeño y de América Latina en comenzar la fase III de ensayos clínicos el pasado 8 de marzo con una muestra de 44 mil 10 voluntarios pertenecientes a ocho municipios de esta capital.

Por su parte, en las plantas del Centro de Inmunología Molecular (CIM) tiene lugar el escalado productivo del antígeno RBD de ese candidato vacunal antiCovid-19 donde se produjeron las 340 mil dosis.

El objetivo del país es llegar a 100 millones de dosis y cubrir la inmunización de más de 11.2 millones de cubanos y que los extranjeros interesados también puedan vacunarse, explicaron los expertos.

El “CIM se convierte en otro de los sitios de vacunación que forman parte del estudio de intervención. Sus trabajadores orgullosos de ser parte de este proceso, que también aportará datos a la validación de los candidatos vacunales”, puntualizó BioCubaFarma en otro tuit.

Dicho período con Soberana-02 tiene como objetivo evaluar los efectos de la vacunación en sectores poblacionales con elevado riesgo de infección, enfermedad y dispersión de la pandemia.

Así como demostrar las consecuencias directas e indirectas sobre la prevención del Covid-19 sintomática y evaluar el efecto en la prevención de la enfermedad severa.

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También valorará los resultados de Soberana-02 sobre la mortalidad ocasionada por el virus SARS-CoV-2, patógeno causante de la pandemia.

Además, documentar el perfil de seguridad del esquema de vacunación con dos dosis de ese candidato y una tercera de refuerzo con Soberana Plus, también del Finlay.

Cuba cuenta en total con cinco proyectos vacunales contra el Covid-19. Además de Soberana 02, el producto Abdala, del Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología, también está en fase III de ensayos clínicos en las provincias orientales Santiago de Cuba, Guantánamo y Granma, con 48 mil sujetos.

En otras etapas de evaluación están Mambisa también del CIGB, así como Soberana-01 y Soberana Plus.

Esta semana también comenzó la fase tres de ensayos clínicos de Abdala, el segundo candidato vacunal en esta fase, con otros 48 mil voluntarios.

Los ensayos clínicos de Abdala, por su parte, se llevan a cabo en las provincias de Granma, Santiago de Cuba y Guantánamo, en el oriente del país.

“Bayamo amanece haciendo historia”, dijo Biocubafarma en Twiter. Una mujer de esta provincia de Granma fue la primera cubana en vacunarse por la mañana con Abdala.

Cuba aseguró tener la más alta tasa de recuperación de pacientes en América frente al Covid-19, con el 94,2% de los que han contraído la enfermedad hasta el 20 de marzo, según el Ministerio de Salud Pública.

Desde que inició la pandemia hace un año Cuba ha registrado 67 mil 476 casos y 397 muertes.

En la capital cubana, las autoridades mantienen medidas sanitarias restrictivas que incluyen la limitación a la circulación de las 21:00 a las 05:00 hora local del día siguiente, así como severas multas a quienes no utilizan o utilizan mal las mascarillas.

La isla vive desde enero último un tercer rebrote de contagios del Covid-19, que obligó a volver a aplicar en el país medidas como la suspensión de las clases escolares, así como el cierre de lugares públicos como casas de renta y hoteles, además de bares y restaurantes.