Arqueología, historia y secretos naturales son los lugares para conocer de Yucatán

MÉRIDA, Yucatán. Aunque la mayoría de los viajeros identifican a la entidad por Chichén Itzá, zona arqueológica maya que fue nombrada Patrimonio de la Humanidad por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) en 1988, y que en 2007 fue designada una de las siete Maravillas del Mundo, las bellezas que resguarda el estado van más allá.

Augusto René Rosado Pavia, guía de turistas en Yucatán, contó que hay otros sitios por visitar: “la ciudad maya de Uxmal, fundada por la tribu de los Xiues en 600 aproximadamente, después de Cristo, se ubica en la poco conocida ruta Puuc, al sur del estado en el Municipio de Santa Elena Yucatán, a 80 kilómetros de la capital”.

Comentó que un kilómetro antes de llegar a Uxmal se puede hacer una parada para visitar y conocer el Museo del Chocolate, donde enseñan el proceso del cacao hasta convertirlo en chocolate.

“Por la misma zona también se pueden visitar otros asentamientos mayas no tan conocidos o concurridos como lo son Kabah, Labna, Sayil y Xlapak que forman parte de la ruta Puuc”, añadió.

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El guía de paseantes subrayó que sin alejarse tanto de la zona y ya de regreso hacia la capital, se puede hacer una escala para comer en el municipio de Mani, recién nombrado Pueblo Mágico.

“Este lugar es muy conocido por su excelente gastronomía regional (queso relleno, relleno negro, papadzules, sopa de lima y poc chuc entre otros); cabe mencionar que en este lugar da inicio la evangelización a los Mayas por parte de los frailes españoles llegados a esta hermosa tierra en 1547”, refirió.

Señaló que ya de regreso a la capital, 42 kilómetros antes está el municipio de Cuzamá, que forma parte del muy conocido anillo de los cenotes y nombrada así por la alineación que existe entre cenotes y relacionada con el impacto del meteorito ocurrido hace 68 millones de años.

“En este lugar podrás encontrar siete cenotes diferentes, de los cuales cuatro tienen una forma muy divertida para llegar, ya que es a través de un medio de transporte conocido en la región como truck (vagón con ruedas de acero, asientos de madera que tira de un caballo o burro y transita sobre rieles semejantes a las del tren) la distancia que recorres entre un cenote y otro va desde los 500 metros hasta más de un kilómetro”, relató.

Además, recomendó llevar traje de baño para este sitio, saber nada o usar chaleco salvavidas por las profundidades de los cenotes.

Pero para Augusto, aún hay mucho más, por lo que pidió no olvidar la zona costera del estado, donde podemos visitar los puertos de Celestún y Progreso de Castro, además del Cuyo. Sin omitir la capital, Mérida.