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La Opinión

De agresores a agredidos: Hamás

Es posible que hoy Hamás y la población que gobiernan sean las víctimas, pero la verdad sea dicha

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Difícil no hacer eco de lo que sucede en Medio Oriente, el lunes 7 de octubre, se cumplió un año de que el movimiento islamista palestino Hamás decidió comenzar una nueva guerra contra Israel, al atacar los kibutz, un festival de música electrónica de jóvenes y algunos puestos de vigilancia militar, el propósito, según ellos, era reivindicar su causa ante el mundo. 

“El glorioso 7 de octubre hizo añicos las ilusiones que el enemigo se había creado, convenciendo al mundo y a la región de su supuesta superioridad y capacidades”, afirmó en un mensaje de video Jalil al Haya, miembro de Hamás basado en Qatar.

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Es posible que hoy Hamás y la población que gobiernan sean las víctimas, pero la verdad sea dicha, ellos comenzaron esta guerra absurda que hoy tiene en vilo al mundo, porque parece que en lugar de frenar se extiende por toda esa zona. Hoy Hezbolá también tiene otro frente abierto en el Líbano.

Israel afirma que en realidad hay siete frentes abiertos en contra de ellos, los más visibles son en la Franja de Gaza, en el Líbano, en Yemen, en Siria y con el propio Irán, que es el real enemigo de los israelíes y los demás son satélites usados y financiados por Teherán para reivindicar su postura “Israel no debe de existir”.

Al grado de que las sirenas de alerta se activaron, la semana pasada, porque Irán bombardeó a Israel con 181 misiles y, por supuesto, el gobierno israelí ha prometido responder –no lo dude– va a suceder, eso representa más leña al fuego, que puede alcanzar a más países de la región y fuera de ella, no se olvide que Estados Unidos es el principal aliado de Israel.

Es tan importante Israel para Estados Unidos, que hoy lo que diga para bien o para mal cualquiera de los candidatos presidenciales, la demócrata Kamala Harris o el republicano Donald Trump, les puede costar el triunfo electoral, la presencia israelí en las esferas políticas estadounidenses es muy fuerte.  

Llamó mucho la atención, como el pasado fin de semana decenas de miles de personas en todo el mundo se volcaron a las calles para pedir un alto el fuego en Gaza y Líbano, y el retorno de los rehenes israelíes, con motivo del primer aniversario de la guerra entre Israel y Hamás. Pero, sin duda, con una marcada tendencia por los palestinos, que hoy parecen las víctimas.

Y no es que no lo sean, simplemente que Hamás maneja un alto nivele de perversidad, para empezar, ¿Por qué atacar a civiles; por qué no buscar un diálogo; por qué los líderes de esa organización, considerada en Occidente como terrorista, no tiene a sus líderes en la Franja de Gaza si no radican en Líbano o Irán; Por qué utilizan a su población como escudos humanos? 

Por qué, Israel defiende su derecho a defender a su población es legal. Hamás, por el contrario, utiliza a su gente para escudarse y mediatizar el grado de masacre que está provocando Israel con sus ofensivas, que nadie dice que no sean letales y desmedidas. Es un dilema saber cómo se comportan unos u otros, pero todos tienen un grado de sinrazón, eso es lo único real. 

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Los islamistas palestinos sabían de atérmano que habría una respuesta implacable, muy probablemente desmedida por parte de Israel, pero eso no les importó ellos decidieron atacar y después se escudaron muchos milicianos en hospitales y escuelas, cómo se puede calificar eso, del lado de Israel es una barbaridad y del lado palestino cómo se llama. 

Hoy se cuentan 42 mil gazatíes muertos todo por reivindicar la causa de Hamás, además hay miles de desplazados y miles de toneladas de escombros, quién va a pagar la reconstrucción, será que Hamás va a romper el cochinito y va a reconstruir todo lo que ha destruido Israel o Irán va a dar parte de sus ganancias petroleras para reconstruir todo lo que se necesite.

En Estados Unidos también hubo expresiones de apoyo para los palestinos, no solo el fin de semana pasado, durante este primer año de guerra varias universidades fueron cerradas en protestas por las ofensivas de Israel, que por cierto, dice que no va a parar hasta que esté eliminado Hamás, recupere a sus 101 secuestrados y pueda regresar a sus casas a 60 mil desplazados, cuándo sucederá eso, solo ellos lo saben.

También, en Venezuela hubo expresiones de apoyo a los palestinos incluso desde el gobierno, pero la verdad no se entiende que calidad moral puede tener el presidente Nicolás Maduro, cuando en su propio país se vive un éxodo de casi 8 millones de personas hartas de las carencias, la falta de oportunidades y una represión desmedida. 

Y como si fuera una burla a los venezolanos, desde el 1 de octubre Venezuela se encuentra celebrando la Navidad, como festejo por el supuesto triunfo electoral de Maduro, quien asegura que ganó la reelección y no hay poder humano en ese país que pueda demostrar lo contrario, el tratar de hacerlo puede ser letal.

Hasta cierto punto, la postura de Maduro tiene lógica si tomamos en cuenta que Hezbolá ha operado en ese país de manera libre, como ¡Pedro por su casa! Entonces la postura del chavismo tiene una razón.

Por su lado, el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, prometió vencer a los “enemigos” de Israel y su Ejército bombardeó objetivos de Hezbolá cerca de Beirut y de Hamás en la Franja de Gaza, en la víspera del primer aniversario del ataque de Hamás en suelo israelí.

“Juntos lucharemos y juntos venceremos”, declaró Benjamin Netanyahu durante una visita a sus tropas en el norte de Israel, en la frontera con Líbano. Pero el premier, también, tiene otro interés en esta guerra, dejar en el olvido las acusaciones de corrupción que pesan sobre él y sus fracasadas intenciones por coartar la libertad del poder judicial.

Esta misma semana, comienza el segundo año de guerra, eso es muy preocupante, pero lo es más que cada vez más países se suman a esta disputa bélica, que puede escalar mundial y eso nos involucra a todos, estemos cerca o no de los principales actores. O Usted, ¿qué cree?

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