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¿Los probióticos ayudan en la pérdida de peso?

La forma más confiable de perder peso es seguir una dieta saludable y hacer ejercicio con regularidad, para quemar más calorías de las que se consumen

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Aunque es poco probable que tomar un probiótico cause daños, también es posible que no ayude a combatir la obesidad, pues la población de bacterias intestinales de las personas obesas es diferente a la de las delgadas, advirtió Meera Shah, especialista en Endocrinología, Diabetes y Metabolismo de Mayo Clinic en Rochester, Minnesota.

Destacó la importancia de entender que el aumento de peso es esencialmente una función del desequilibrio energético, que se presenta cuando se ingieren más calorías de las que el cuerpo quema, aunado a que las bacterias intestinales influyen en la eficacia con la que el organismo extrae la energía de los alimentos que llegan al intestino delgado.

Explicó que el tracto digestivo o intestino contiene trillones de bacterias, muchas de las cuales desempeñan funciones útiles en el organismo, como metabolizar los nutrientes de los alimentos, y mencionó que un desequilibrio entre las bacterias intestinales buenas y malas podría contribuir a ciertos trastornos médicos.

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Señaló que el consumo de alimentos como el yogur y el chucrut, que contienen probióticos (un tipo de bacteria “buena”) o la toma de suplementos de probióticos demostraron ser beneficiosos para la salud, pero aclaró que aunque se necesita más investigación, hay pruebas de que los probióticos podrían mejorar la salud intestinal.

La especialista refirió que los únicos estudios que mostraron resultados convincentes de que la modificación de la composición de las bacterias intestinales -microbioma intestinal- afecta al peso se realizaron en ratones sin gérmenes, y en cambio, en seres humanos, los datos son confusos en lo que respecta al rol de los probióticos en la pérdida de peso.

Subrayó que el factor más importante que determina la composición del microbioma intestinal es la alimentación, pues comer muchas frutas y verduras parece ayudar a que las bacterias intestinales buenas prosperen.

Asimismo, apuntó, puede ser útil para satisfacer el hambre y limitar el consumo excesivo de bocadillos y otras calorías innecesarias.

Meera Shah expuso que limitar las grasas, el azúcar y las fuentes de proteínas de origen animal también puede ayudar a mantener un microbioma intestinal más saludable, pues las investigaciones demuestran que las dietas ricas en esos alimentos se correlacionan con una composición bacteriana más desfavorable en el intestino.

Tomar suplementos probióticos también puede mejorar la salud del microbioma intestinal, pero no está claro qué papel desempeñan estos suplementos en la pérdida de peso, aunque la forma más confiable de perder peso es seguir una dieta saludable y hacer ejercicio con regularidad, para quemar más calorías de las que se consumen, puntualizó.

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