Inflación incrementa costos del transporte de productos en BCS

Baja California Sur registra un índice inflacionario superior al del resto del país, derivado –entre otros- por el costo del flete marítimo y terrestre que afecta a prácticamente todos los productos y mercancías e insumos que demanda la entidad.

El problema se agravó durante al menos 4 meses cuando uno de los ferries salió de circulación, lo que originó atrasos de hasta 20 días en la salida de la carga de La Paz a Topolomapo, o la vuelta hasta Mexicali que encareció casi en un 100 por ciento el flete, incrementos que finalmente se trasladaron al consumidor final.

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El dirigente estatal de la COPARMEX Gustavo Díaz Tronco recordó que hasta el pasado mes de noviembre a nivel nacional la inflación se ubicó por el 7.8 por ciento, y según sus estimaciones seguirá a la alza al menos durante los primeros meses del año.

Inflación, un impuesto

No obstante, señaló que en Baja California Sur la inflación alcanzaría este año una tasa de entre el 15 y el 17 por ciento, casi el doble de la cifra nacional; la inflación dijo, es como un impuesto que finalmente pagan los consumidores por lo que urge que el gobierno federal y del estado implementen medidas para detener o en su caso mitigar sus efectos, de otra manera, dijo el aumento al salario mínimo quedará completamente neutralizado.

Recordó que esta diferenciación se refleja más en la inflación no subyacente que ha afectado siempre a Baja California Sur debido a cuestiones de logística, y considerando que somos un estado meramente importador.

Con todo y lo anterior, el líder del sindicato patronal destacó que en esta entidad más del 60 por ciento de los trabajadores de la economía formal perciben un sueldo muy por encima de la medida nacional, con entre 3 y 3.5 veces el salario mínimo.

Efectos en agricultura

Para los productores agrícolas, el efecto ha sido más severo, con insumos que aumentaron hasta en más de un 100 por ciento como sucedió con algunos fertilizantes, cuya materia prima proviene de Ucrania, y cuya producción se vio afectada por la guerra con Rusia.

El encarecimiento y la falta de créditos para el sector agropecuario también contribuyeron al aumento en la inflación; la Financiera Rural que hasta antes del 2018 ofrecía tasas de interés de entre un 8 y un 10% pasó a cobrar prácticamente las mismas que la banca comercial.

Según estimaciones del Banxico, el año 2022 cerraría con una inflación del 8.5 por ciento, y sería de las más altas de los últimos 20 años, solo comparada con la de 8.95 que se registró en el año 2000.

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Otro factor, estuvo relacionado con la oferta y la demanda; luego de dos años de pérdidas, el mercado de hortalizas registró un notable aumento en la demanda que a su vez incrementó los precios de chile, tomate, cebolla, calabaza, aguacate, melón, sandía, papaya, jícama, elote y nopal, entre otros.

En el caso del frijol, el precio llegó en algunas regiones del norte del estado hasta los 60 pesos el kilo, aunque en La Paz y Los Cabos se mantuvo casi estable.

Hasta hace pocos días, el precio del chile jalapeño se ubicaba en los 50 pesos el kilo, el ancho y el güerito en más de 60, el serrano en 69 y el California en 89, mientras que el limón llegó a los 46 pesos, la naranja a 49, tan solo por citar algunos.

Aumentan carne hasta 50 por ciento

En fechas recientes, en algunas tiendas de La Paz, el kilo de palomilla llegó hasta los 290 pesos y el del menudo hasta 130, con incrementos de más de 50 por ciento.

Según datos de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos, (OCDE), la inflación en alimentos durante el 2022 se ubicaría en un 16.1 por ciento entre los 38 países que integran esa organización, la cifra más alta desde el año 1974.

En términos generales la inflación promedio en los 38 países alcanzó un 10.7% en octubre pasado mientras que México se ubicó con un 8.41; No obstante otros especialistas señalan que la inflación podría llegar hasta el 12 o el 13 por ciento y en el caso de Baja California Sur hasta en más del 15.

Materiales de construcción caros

Otro factor que contribuyea este índice inflacionario, tiene que ver con el incremento en los materiales de construcción que se registra de manera constante durante todo el año 2022, particularmente en acero, cemento, cobre, PVC y otros productos que han subido hasta un 50 por ciento.

Mano de obra también sube

Tan solo por citar un ejemplo, construir un baño hace dos años costaba 125 mil pesos, en la actualidad requiere 200 mil pesos, una parte determinada por el alza en los materiales y otra por lo caro de la mano de obra, ya que la industria de la construcción ha detonado en los últimos meses, generando una gran demanda de obreros de la construcción a los que se les llega a pagar hasta 600 pesos por día para el nivel de ayudante de albañil.

Según estimaciones del Banxico, el año 2022 cerrará con una inflación del 8.5 por ciento, y sería de las más altas de los últimos 20 años, solo comparada con la de 8.95 que se registró en el 2000.

La inflación subyacente está reflejada por el índice de precios al consumo (IPC), mientras que la no subyacente se integra por bienes y servicios cuyos precios no responden directamente a condiciones de mercado, sino que se ven altamente influenciados por condiciones externas como el clima o regulaciones gubernamentales.

Elías Medina | El Sudcaliforniano

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