La Opinión

La disolución de la Policía de la Moral es una medida cosmética del gobierno de Irán

Se tardó más de tres meses el régimen teocrático de Irán en “anular“ a la Policía de la Moral responsable del arresto y muerte de la joven kurda de 22 años, Masha Amini, por supuestamente no portar de manera adecuada el velo islámico

Published

hace 1 año

diciembre 6, 2022

Alfonso López Orrante

Se tardó más de tres meses el régimen teocrático de Irán en “anular“ a la Policía de la Moral responsable del arresto y muerte de la joven kurda de 22 años, Masha Amini, por supuestamente no portar de manera adecuada el velo islámico. Eso desató una ola de protestas que ha dejado ya casi 400 muertos –entre ellos varios niños–, unos dos mil detenidos y un gobierno que busca una solución salvavidas.

El fiscal general de Irán anunció el fin de semana la disolución de esta unidad especial de la Policía, encargada de hacer cumplir el código de vestimenta y que tiene la potestad para detener a las mujeres que consideren que llevan el pañuelo de forma inapropiada.

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El velo es obligatorio en Irán desde 1983, poco después de la revolución liderada por el ayatolá Ruholá Jomeiní en 1979, quien declaró que sin esta prenda las mujeres estaban “desnudas”.

La supuestamente hoy extinta policía de la moral, conocida como Gasht-e Ershad (patrullas de orientación), fue creada bajo el mandato del ultraconservador presidente Mahmud Ahmadineyad (de 2005 a 2013) para “difundir la cultura de la decencia y el hiyab”, el velo femenino.

Sus unidades estaban formadas por hombres con traje verde y mujeres que llevan un chador negro, una prenda que cubre todo el cuerpo salvo la cara. Las primeras patrullas empezaron a trabajar en 2006. Gasht-e Ershad fue creado en su momento por el Consejo Supremo de la Revolución Cultural, ahora dirigido por el presidente ultraconservador Ebrahim Raisi, elegido en 2021.

En realidad, resulta difícil creer que la torturadora Policía de la Moral vaya a desaparecer por completo, quizá va a descansar unos meses, después va a cambiar de nombre y se llamará de cualquier otra manera, por lo pronto esta célula –que más bien es un grupo paramilitar– se tomaba todo tipo de libertades para cometer abusos, los cuales se viralizaron y evidenciaron con la muerte de Amini.

El tema del velo sigue siendo muy delicado en la República Islámica. Por un lado, están los conservadores, que defienden la ley de 1983. Por el otro, los progresistas, que desean que las mujeres puedan decidir libremente si llevarlo o no. Desde el inicio del movimiento de protestas, hay cada vez más mujeres que salen a la calle sin el velo, especialmente en el norte acomodado de Teherán, la capital.

De hecho, el uso se el velo se ha convertido en un motivo de tortura para las mujeres, no sólo en Irán, en varios países de Oriente Medio su uso es obligatorio, eso está acompañado un alto número de restricciones para su vida diara y de superación, por ejemplo, en Afganistán donde es obligatorio el velo islámico y desde la llegada al poder de los Talibán ya no puede asistir a clases.

Lo cierto es que activistas opositores y potencias occidentales desestimaron el anuncio de la disolución de la Policía de la Moral en Irán y advirtieron que las autoridades seguirán aplicando sus estrictas normas sobre la vestimenta de las mujeres.

A menos que eliminen todas las restricciones legales sobre la vestimenta de las mujeres y las leyes que controlan la vida privada de los ciudadanos, esto es sólo una medida de relaciones públicas”, dijo Roya Boroumand, cofundadora del grupo de derechos Abdorrahman Boroumand Center, con sede en Estados Unidos.

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Y la verdad tiene razón, la teocracia iraní es la que pone y dispone de casi todo lo que sucede en ese país, no hay una sola cosa que se haga en Irán sin la aprobación del ayatolá Ali Jamenei, la máxima autoridad religiosa y política en esa nación, en pocas palabras es la autoridad suprema.

Eso hace pensar a más de uno que la medida de retirar a la Policía de la Moral, es un anunció más cosmético que real, la disciplina religiosa es prioritaria en el territorio persa, aunque también es cierto que si algo ha podido robar la atención mundial de la invasión a Ucrania, es la ola de marchas en contra de la represión de ese régimen a su población.

El problema para las autoridades en Irán es que los jóvenes ya no están dispuestos a someterse a las prácticas represivas instauradas hace 43 años, tras la caída del sah Mohammad Reza Pahlavi, quien por cierto estuvo exiliado en nuestro país en Cuernava, Morelos, no es que las cosas hubieran estado mejor que el último rey iraní, pero tampoco mejoraron con las actuales autoridades.

La venta de petróleo, el enriquecimiento de uranio, el abuso de los derechos humanos y la cooperación militar con los países antagonistas de Estados Unidos, representan la política nacional e internacional de esa nación, que subsiste a pesar de una ola de sanciones y bloqueos económicos en su contra.

Lo único seguro y real es que las autoridades iraníes no van a relajar sus medidas religiosas por la presión internacional, no les importa, pero al interior del país no pasa lo mismo puede ser que estas protestas se conviertan en la nueva Primavera Iraní y que las autoridades actuales tengan que recurrir a la graciosa huida como lo hizon sus antecesores. Quizá aún es muy temprano, pero… O usted ¿Qué cree?