Temporada de captura de langosta tiene un arranque positivo en Baja California Sur

Desde el 1 de octubre inició la temporada de captura de langosta en la Región 2 de la Zona Pacífico Norte, la cual comprende Bahía Asunción, La Bocana y Punta Abreojos, hasta San Juanico; y 15 días antes, arrancó en la Región 1, que comprende las Islas Cedros y Natividad, Bahía Tortugas y Puerto Nuevo.

A diferencia de años anteriores cuando en estas mismas fechas el precio del producto comenzaba a bajar, en esta temporada se mantiene estable, con más de 50 dólares el kilo, en promedio.

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La zafra ha iniciado sin incidentes apenas unos semanas después del impacto del Huracán Kay en esa región norte del municipio de Mulegé, que entre otras afectaciones, destruyó parte de la infraestructura de la Cooperativa Punta Abreojos, con daños que según estimaciones preliminares, habrán de requerir una inversión de aproximadamente 4 millones de pesos.

Un reto para los cooperativistas será en traslado de sus productos, ya que los caminos quedaron dañados por las corridas de aguas broncas de Kay, y aunque fueron reparados de manera provisional, en algunos sitios el paso es peligroso debido a que las reparaciones se hicieron con tierra y piedras.

Es el caso del camino a Laguna San Ignacio, en donde hace apenas unos días un camión cargado con 10 toneladas de pescado se ladeó sobre el bordo recién reparado y fue necesario el apoyo de una grúa y una máquina para rescatarlo, trabajos que tuvieron una duración de varias horas.

Como se ha dado a conocer en este mismo espacio, la langosta es uno de los productos de mayor valor que se explotan en esa zona del norte del municipio de Mulegé; en promedio, cada año salen aproximadamente mil 300 toneladas del crustáceo, casi en su totalidad hacia China a donde se envía vivo y al que llega en un promedio de 5 días, vía aérea saliendo del aeropuerto de Los Angeles, California.

La explotación de langosta es exclusiva de las cooperativas, en una zafra que concluye en fechas distintas dependiendo de la zona; el 28 de febrero en las zonas 1 y 2 y el 16 de mayo en la 3 que comprende de Bahía Magdalena a Todos Santos.

Debido a que se trata de un producto de alto valor, entre los principales problemas de esta pesquería destaca el de la extracción ilegal, de tal manera que las cooperativas de la Zona Pacífico Norte deben de realizar fuertes inversiones en vigilancia, en un amplio litoral que va desde el sur de Punta Abreojos hasta Isla Natividad, y en la Bahía Sebastián Vizcaíno en donde se ubican los campos pesqueros, El Queen, Malarrimo, El Campito del Chevo, Chester y Punta Eugenia.

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En el caso de los cooperativistas que iniciaron la temporada de captura el pasado 16 de septiembre, estos reportan un inicio exitoso de la temporada, ya que están reportando capturas similares a las del año anterior y aunado a esto, los precios de la especie han tenido un ligero incremento.

Actualmente son más de 500 socios pertenecientes a distintas agrupaciones, los que salen al mar para levantar las trampas en las que capturan a las langostas para enviarlas a los campos pesqueros, de donde son enviadas vivas a la ciudad de Ensenada.

De acuerdo al proceso que tiene su comercialización, estas son empacadas y enviadas al aeropuerto de Los Ángeles, California, de donde son enviadas por vía aérea a China. Con este mecanismo se estima que el producto llega a manos del distribuidor, en un plazo inferior a siete días.

Las cooperativas que operan en esta zona, producen más del 60% de producción que se logra en la Pacífico Norte, misma que alcanza un promedio de mil 300 toneladas al año. La parte restante que oscila entre el 38 o 39 por ciento, se obtiene de Bahía Asunción, La Bocana, Punta Abreojos y Puerto Chale.

Un aspecto importante que están detectando los pescadores radica en las condiciones de la especie, ya que los ejemplares que están siendo capturados muestran tallas y un peso adecuado, lo que hace evidente que gozan de buena salud.

Cabe mencionar que el traslado transcurre de manera positiva y sólo se han tenido algunos retrasos menores en el aeropuerto estadounidense, los cuales no afectan las operaciones de los productores, porque tampoco influyen en el bienestar de los ejemplares, inclusive esto lo consideran como un factor positivo en su destino final, ya que el nivel de oferta que se mantiene, impide que el precio baje.

Elías Medina | El Sudcaliforniano