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Guanajuato

Los comerciantes de buñuelos de León están listos para recibir a los visitantes por fiestas patronales

Con la fe en Dios es la frase de los vendedores que lograron regresar, luego de la pandemia

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Foto: Vanessa Hernández

LEÓN, Guanajuato. Los comerciantes dedicados a la venta de buñuelos y atole están listos para la fiesta de la Madre de la Santísima Luz, patrona de los leoneses, que les permitirá vender durante un mes en la zona peatonal de la ciudad.

Las personas dedicadas a la venta de este dulce típico de las fiestas patronales siguen este oficio por herencia familiar y después de dos años de pandemia se dicen felices de regresar al corazón de la ciudad a realizar su vendimia.

Los buñuelos están listos Con la fe en Dios, es la frase de los comerciantes que lograron regresar a vender con mucho esfuerzo, todos coinciden que sus ventas han sido muy tristes en los primeros días.

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Cada uno con su sazón, saben que el ingrediente más importante es el “amor”, a la hora de prepararlos y eso hace la diferencia.

La primera comerciante en la fila de buñuelos es la señora Martha Solís Hernández, quien lleva más de 35 años dedicada a esto por herencia familiar, comenta que estuvo parada un año y la pasó muy mal como la mayoría de las personas.

“Todavía está muy triste, como no trabajamos dos años y luego nos cambiaron de espacio, nos echaron atrás de donde normalmente nos ponían en el pasaje Hidalgo y nadie sabe que estamos aquí”, dijo algo molesta pues las ventas no han sido las esperadas.

Para poder sacar sus gastos tuvo que aumentar 5 pesos a sus buñuelos ahora su precio es de 25, antes de pandemia los ofrecía a 20 pesos, los tamales y atole los mantiene a 15 pesos.

A unos pasos está J. Guadalupe Gasca, el más orgulloso y alegre de la fila. Compartió que su mamá logró una trayectoria de 64 años en la venta de buñuelos en Catedral, hasta hace 4 años que falleció y él quiso seguir con el legado.

En la temporada pandémica batalló como todo el mundo, asegura que la voluntad de Dios estuvo con él en todo momento y lo hizo salir adelante sin tener un ingreso fijo.

“Yo comienzo a las 3 de la mañana, para preparar la harina, hago de 6 a 7 kilos, las ventas no han sido nada buenas, pero recuerdo a mi santa madre era muy generosa, pasaba la gente y se la pasaban regalando y trato de hacer lo mismo y poco a poco sale”.

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El último puesto corresponde a Claudia Zúñiga, una leonesa más que creció haciendo masa para buñuelos, oficio de su bisabuela, abuela y su mamá, ella con su propio puesto lleva 40 años visitando todas las verbenas que se realizan en los templos de la ciudad.

Las cosas no han salido como ella se lo esperaba, el cambio de lugar sus ventas no han sido las que ella esperaba.

“Estamos desde el 1 de mayo, en este lugar la gente no nos ubica, nos incrementaron el precio del permiso 1200 más que el costo de hace dos años”.

Pese a todo, espera que la situación cambie en el transcurso del paso de los días. Su plan es darlos más económicos para que le salga, actualmente los da 20 pesos, originalmente los daba a 15 pesos antes de la pandemia.

Esta celebración nació, según refiere datos del Archivo el 23 de mayo de 1849, cuando la Virgen Santísima de la Luz fue nombrada Patrona de la ciudad de León, y ha sido la imagen más venerada en la ciudad desde su llegada en julio de 1732.

Vanessa Hernández | El Sol de León

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