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Seguridad

Municipios con altos índices delictivos rodean el nuevo aeropuerto de Santa Lucía

En ellos faltan el empleo, actividades económicas, infraestructura educativa y de desarrollo sustentable

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Foto: Cuartoscuro

Los ocho municipios que rodean el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA) padecen deficiencias en el transporte público, la existencia de vías discontinuas y desestructuradas, así como la falta de empleo, de actividades económicas, de una infraestructura educativa y de desarrollo sustentable.

De acuerdo con un diagnóstico de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu), esas características hacen que los municipios que circundan al nuevo aeropuerto en Santa Lucía tengan “condiciones para el incremento de hechos delictivos”.

El documento en el que se describen las condiciones de los ocho municipios colindantes del AIFA refiere que existe una mezcla de factores asociados a la pobreza y marginación de esas localidades que propician hechos delictivos crecientes entre los habitantes, pero también de los pasajeros usuarios de las líneas áreas en ese aeropuerto.

Los municipios en cuestión son Jaltenco, Tecámac, Zumpango, Tonanitla, Nextlalpan, Tultepec y Tultitlán, en el Estado de México, así como Tizayuca, en Hidalgo.

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El programa operativo de la Zona Norte del Valle de México del gobierno federal coincide con los señalamientos de los habitantes de las colonias aledañas al AIFA en el sentido de las escasas opciones de transporte público al momento de la apertura de actividades del aeropuerto y a pesar de que se han desarrollado obras para lograr un mejor acceso.

Únicamente el municipio de Tultitlán cuenta con transporte de alta capacidad de pasajeros con infraestructura propia como el Tren Suburbano y Mexibús, por su parte el resto de los municipios depende únicamente del transporte concesionado, en el cual, adicionalmente los pasajeros frecuentemente son víctimas de hechos delictivos”, señala el documento de Sedatu.

Hasta el mes pasado, con datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), las autoridades estatales tenían detectados como “focos rojos” varios de los accesos viales a la nueva terminal aérea debido a la incidencia de robos y asalto a pasajeros de autobús.

Entre ellos, el recorrido de la México-Pachuca, en particular a la altura del kilómetro 15 donde se encentran los accesos a Ecatepec y la vía José López Portillo (Tultitlán).

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Durante el último año fueron comunes los videos que circularon en redes sociales en los que se dieron a conocer los asaltos en donde los pasajeros golpearon a quienes subieron a robar lo mismo mochilas, celulares y carteras a los usuarios en esas rutas.

En el caso de la extorsión, el municipio de Tecámac aparece en el top de las diez localidades de mayor incidencia.

Por lo que hace a los feminicidios, Tultitlán está entre los primeros lugares dentro del Estado de México.

De acuerdo con el documento de la Sedatu, “el sistema vial es discontinuo y desestructurado, dado que no presenta una jerarquización consolidada en las vías que lo componen, estas carencias provocan mayores distancias y tiempos de traslado para las personas y mercancías, la falta de transporte público, de calidad y a precios accesibles, dificulta la movilidad de las personas”.

La dependencia federal reconoce que existen vías y elementos como el mismo Circuito Exterior Mexiquense, la carretera México-Pachuca o las vías del ferrocarril que cruzan la zona norte del Valle de México que tienen un efecto de borde, haciendo más inaccesibles, costosos y complejos los trayectos entre los municipios y localidades.

“Todo conlleva una situación de alta ineficiencia que afecta la productividad de la zona y el bienestar de sus habitantes. Esto se complica aún más por la falta de infraestructura para la movilidad no motorizada, dado que no existen las condiciones adecuadas para fomentar este tipo de desplazamientos”.

Además, agrega, existe una insuficiente oferta de infraestructura vial para llegar a la ZMVM, la que en su mayoría implica el pago de peaje, encareciendo los viajes también en automóvil privado y teniendo como principales vías de acceso las carreteras México-Pachuca, México-Querétaro y el Circuito Exterior Mexiquense.

Al brindar una mirada de los puntos donde se podría generar la mayor afluencia de pasajeros al AIFA, el Gobierno federal ubica que los principales puntos de partida de los usuarios serían el entorno de la Torre de Petróleos, Paseo de Reforma y la zona de Santa Fe.

La cantidad de pasajeros desde ese punto se consideraban desde ese momento como una “problemática, de una demanda rebasada de los sistemas de transporte masivo, semi masivo y de baja capacidad”. Además de que el transporte público carece de regulación y aplicación de normatividad en las rutas alimentadoras y los principales Centros de Transferencia Modal, ubicados en las zonas periféricas, están saturados.

El diagnóstico federal señala que otra problemática se relaciona con una significativa escasez en la oferta laboral bien remunerada para la población residente.

Indica que “la principal oferta laboral se concentra en unidades económicas de manufacturas ubicadas principalmente en Tultitlán y Tizayuca, así como comercios al por menor en el resto de los municipios”.

Esta es una de las principales causas por la que los habitantes de la región se ven obligados a realizar actividades informales.

En términos generales, la Sedatu explica que “la carencia de espacios públicos de calidad, que deben ser concebidos estratégicamente –dado que son elementos que hacen realidad el derecho a la ciudad y promueven la cohesión social entre los ciudadanos–, ayudan a disminuir los índices de inseguridad y violencia existentes en la región. Siendo Tonanitla, Jaltenco y Nextlalpan los que presentan mayores rezagos”.

Nurit Martínez | El Sol de México

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