Con cristales, pectorales y tocados, Gustavo Helguera viste las pasarelas

Con un lenguaje que va más allá del erotismo y la sensualidad, el diseñador Gustavo Helguera crea todo un concepto en el que el cristal se convierte en su mejor aliado y en la materia prima protagonista en la confección de diseños únicos que cubren el cuerpo como si fuera una armadura, y que empoderan tanto a la mujer como al hombre sin ningún tabú.

“Estoy haciendo piezas completas para el cuerpo, no puedo llamarle vestidos, sino estructuras completas; estoy tratando de no hacer lo mismo de siempre y buscar una nueva manera de ver las cosas a través de los cristales. Estoy muy inspirado en la época de los sesentas, dándole un twist para esta época actual; son como redes llenas de brillos”, dice el creativo.

Con la misma esencia que Paco Rabanne creaba aquellos vestidos de metal que formaron parte de sus icónicas colecciones, Gustavo Helguera, eslabón con eslabón, une cada una de las piezas que dan forma a gargantillas, pectorales, tocados y otros accesorios que según dice, pueden ir en cualquier parte del cuerpo.

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“Todas las piezas se hacen de manera manual, más no es artesanía. Para que una pieza se considere artesanía tiene que ser replicada varias veces y hasta por generaciones, pero esto es hecho a mano de manera humana, no en serie, ni con máquinas. Llevo 30 años trabajando los cristales, soy un gran enamorado del brillo. Los cristales que uso tienen origen en diferentes partes del mundo como Alemania, Austria, Checoslovaquia o Egipto, y los mezclo con piezas semipreciosas”.

Esta tendencia de la transparencia y el cristal se ha visto en las alfombras rojas más importantes como la Met Gala, en la que algunas celebridades como Kendall Jenner o Kim Kardashian han lucido vestidos cubiertos de cristales, e incluso Megan Fox en la última gala de los premios MTV.

“Pero no lo veo como un estilo Kardashian es más Saint Laurent, y de Paco Rabanne. Esto viene de atrás, del Medievo es una reinterpretación de lo ya existió hace mucho tiempo, es todo un tema”.

Pero aunque podría ser una propuesta futurista, para Gustavo Helguera sus piezas no tienen ni tiempo ni género. “El futuro es hoy y el pasado es hoy, no existe tiempo en la creación, ni tampoco género”, dice.

Asegura que su joyería es para todo el mundo y que actualmente esta ya no se segmenta, sino que son más piezas sin género, porque no es exclusivas de hombres, mujeres o de la comunidad LGBT+, pues su uso se está generalizando.

“Cualquier expresión artística o de moda se lleva a niveles más humanos en general, es por el lado de ser libre, una libertad de ‘me gusta, me lo quiero poner y lo adopto´”, apunta Gustavo Helguera.

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El joyero mexicano dice que a partir de la pandemia su posicionamiento se logró a través de las redes sociales:

“Cuando los escenarios cerraron, Instagram se convirtió en la pantalla de la grandeza donde todo mundo mostró lo que su ingenio podía alcanzar. A la gente le gusta brillar siempre que viene de una depresión como la que hemos vivido. El brillo da una alegría especial, pensar en brillo es pensar en optimismo y en felicidad”.

Aplicaciones encima del tabique, buscar partes inusuales del cuerpo donde llevar una joyería, e incluso crear extensiones a partir de donde cuelga un piercing es lo que hace a Helguera ser diferente a los demás.

“Es parte de ser un creativo, para hacer pulseras y aretes hay una fila de gente haciéndolo; yo he tratado de buscarle por otro lado si pretendo ser diseñador tengo que hacer una propuesta”.

Dice que sus diseños son para gente que le gusta ser vista y atraer miradas: “Si eres una persona tímida o quieres pasar desapercibida, Gustavo Helguera no es para ti”.

La joyería de Gustavo Helguera ha sido parte del guardarropa de figuras como Eiza González, Edith Márquez, Martha Cristiana, Regina Orozco, Susana Zabaleta, Danna Paola, entre otras.

“Desde las chavitas hasta las no tan chavitas, varias generaciones de personas usan mis piezas”, destaca.

“También me siento orgulloso de colaborar con este nuevo género de arte que existe que es el arte drag, en cualquier género de arte que se visibiliza estoy presente”, añade.

“Mi mayor reto es la reinvención, buscar cosas distintas para no aburrirme”, puntualiza el artista que en días pasados presentó su más reciente colección en el Spring Fashion Show de la Riviera Maya.

Gerardo León | El Sol de México