Mujeres turistas llevan de nuevo el Covid-19 a Nueva Zelanda

Las autoridades de Nueva Zelanda descubrieron que dos turistas que viajaron desde Reino Unido dieron positivo de coronavirus (Covid-19), un virus que no ha había detectado en desde finales de mayo de 2020.

Las dos mujeres obtuvieron un permiso especial para viajar a Nueva Zelanda con la finalidad de visitar a un familiar que estaba moribundo. Sin embargo no esperaron a que terminaran los 14 días de la cuarentena y decidieron conducir 650 kilómetros que separan a Auckland de Wellington, la capital.

El director general de Salud, Ashley Bloomfield, afirmó que las mujeres habían cumplido el protocolo requerido en el país para turistas y que no habían puesto en riesgo a nadie.

Tras darse  conocer que las mujeres dieron positivo al coronavirus, el gobierno neozelandés decidió suspender las excepciones de ingreso a turistas concedidas por razones caritativas, y hacer obligatoria la cuarentena para visitantes de otros países.

“Solo se restablecerán una vez que el gobierno tenga confianza en el sistema”, expresó  David Clark, ministro de Sanidad.

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Las mujeres, una de ella en la edad de los 30 y otra en los 40, llegaron el 7 de junio a Auckland en un vuelo procedente de Reino Unido y con escala en la ciudad australiana de Brisbane.

Sólo los neozelandeses, sus familiares y los trabajadores esenciales tienen permiso para cruzar la frontera y todos están obligados a pasar dos semanas de aislamiento controlado en un hotel.

Seis días después de su llegada, explicó Bloomfield, las mujeres viajaron de Auckland a Wellington “en un vehículo privado” porque se les concedió una exención por motivos caritativos y se diseñó un plan de seguridad con las autoridades. No se les hizo la prueba de Covid-19.

La pareja hizo el viaje de aproximadamente ocho horas sin detenerse por suministros ni salir del coche, y tampoco usaron baños públicos.

 “No tuvieron contacto con nadie más durante ese viaje”, aseguró el director general de Salud de Nueva Zelanda.

Tras dar positivo en el examen el lunes 15 de junio, una de las dos mujeres dijo que había experimentado síntomas y que los había atribuido a una afección médica preexistente. Ambas están ahora en aislamiento con un pariente en Wellington.

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Las personas que por motivos caritativos obtienen permiso para abandonar los hoteles de la cuarentena administrados por el gobierno neozelandés pueden pasar el duelo con sus familiares pero no asistir al funeral.

“No debemos ser complacientes, tenemos que permanecer atentos. Hay una pandemia arrasando fuera de nuestras costas”, expresó Bloomfield.

En Nueva Zelanda, una isla de cerca de cinco millones de habitantes, se han confirmado menos de 1.500 casos de Covid-19 y 22 muertes de pacientes con la enfermedad tras el estricto y temprano cierre de fronteras impuesto por la primera ministra, Jacinda Ardern,  elogiada a nivel mundial por su reacción ante la pandemia.

“Aunque el trabajo no se ha acabado, no se puede negar que esto es un hito. Gracias, Nueva Zelanda”.

“Confiamos en que hemos eliminado la transmisión del virus en Nueva Zelanda por ahora, pero la eliminación no es un hecho puntual, es un esfuerzo sostenido”, expresó la mandataria, pero afirmó que había que actuar con prudencia porque podrían presentarse nuevos casos.