El Grupo Monterrey no es adversario del presidente de México

El Grupo Monterrey, que agrupa a empresas como Alfa, Femsa, Cemex, Vitro, Gruma, aseguró que son adversario del presidente de la República, Andrés Manuel López, a pesar de que no coinciden con su plan de reactivación económica y así salir de la crisis del coronavirus.

“Los empresarios no somos sus adversarios, por el contrario, somos un componente indispensable en la eventual recuperación económica de nuestro país”, explicaron señalaron los dueños  Alfa, Cemex, Vitro, Frisa, Xignux y otras compañías del Grupo Monterrey.

La tarde del 7 de abril de 2020, el presidente de la República comió y conversó con Armando Garza Sada de Grupo Alfa, Rogelio Zambrano, presidente de Cemex, Adrián Sada de Vitro, así como Eduardo Garza T. Junco de Frisa y Juan Ignacio Garza Herrera, CEO de Xignux.

Al reunirse con el presidente Andrés Manuel López Obrador, los empresarios del Grupo Monterrey le ofrecieron su solidaridad, a pesar de tener diferentes puntos de vista acerca de cómo abordar la presente crisis sanitaria y económica.

Los líderes del sector privado neoleonés argumentaron que proteger el empleo es complementario a ese propósito, por lo que se requiere una política pública enfocada a cero despidos y cero cierres de empresas para que la crisis actual sea transitoria.

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Carlos Salazar Lomelín, presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), invitó a los empresarios a organizarse para juntar 30 millones de mexicanos para que en año y medio le revoque el mandato al presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador (AMLO). 

“Dentro de un año y pico tendremos la posibilidad, porque así lo estableció nuestro Congreso de la Unión de hacer una revisión democrática o un rechazo de mandato (a AMLO). Ahí es el momento y si alguien cree que esa es la forma: Por favor, organícense”, dijo el líder del organismo, quien a todo momento intentó explicarle a unos 500 empresario la negociación sostenida con el fundador de Morena.

“Qué van a lograr con salir y decir que se vaya (el presidente de la República): ya sucedió y no somos los primeros que estamos diciendo que se vaya”, comentó el ex director de Femsa y uno de los integrantes de Grupo Monterrey.

La historia del Grupo Monterrey se remonta del estado, cuando apoyaron al gobernador Santiago Vidaurri en contra del presidente Benito Juárez, y se aliaron a la Confederación en la Guerra Civil estadounidense. En épocas más recientes, apoyaron la candidatura de Juan Andrew Canales Clariond, para Presidente de México en 1940, en contra de Manuel Ávila Camacho. Andrew Almazán era un nazi un confeso. Por si fuera poco, hay que señalar de Adolfo Hitler.

Grupo Monterrey se entiende como las empresas fundadas por las familias Zambrano Gutiérrez y Zambrano Treviño, de Cemex; Sada Zambrano y González Sada (Cydsa); Garza Sada y Garza Lagüera (Alfa y Visa); Sada Zambrano y Sada González (Vitro); Zambrano Gutiérrez y Zambrano Lozano (Proeza), todas ellas familias procedentes del Porfiriato o antes; Maldonado Elizondo (Coparmex); Clariond Reyes y Canales Clariond (IMSA); Santos González y Santos de Hoyos (Gamesa); Lobo Morales y Lobo Villarreal (Protexa); Garza Garza y Garza Herrera (AXA); González Moreno y González Barrera (Gruma) y Ramírez González y Ramírez Jáuregui (Ramírez). Muchas de esas empresas ya están en manos de capital extranjeros.

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Si miles de micro, pequeñas y medianas empresas quiebran, muchos de sus trabajadores podrían caer en situación de pobreza en pocos meses, por lo que se vuelve necesario apoyar liquidez de estas compañías y así evitar la afectación de las cadenas productivas y de proveeduría, dice el Grupo Monterrey.

“No se trata de rescatar empresas sino de evitar que una crisis de liquidez se transforme en una de insolvencia. Ante esta crisis es necesario que los recursos de la banca de desarrollo de NAFIN se amplíen en monto y flexibilicen su manera de trabajar”, manifestaron al presidente de la República.

Los empresarios refirieron que han comprometido recursos materiales a tres iniciativas de beneficio directo a la comunidad de Nuevo León: compra de insumos médicos estratégicos, transferencias a trabajadores desempleados y fabricación de ventiladores de bajo costo.

Se apoya al gobierno de Nuevo León en la gestión de la crisis sanitaria a través de la asesoría de consultores especializados, a fin de enfrentar de la manera posible la presente pandemia en el estado, como se hizo en las graves inundaciones de Monterrey en 1988 y 2010.

Luego de valorar la disciplina fiscal del Gobierno federal, los líderes empresariales consideraron que las intervenciones del Gobierno también deben centrarse en reducir la incertidumbre y crear confianza, porque esto ayuda a disminuir la intensidad y la duración de la crisis.

Ante la posibilidad de que la pandemia sea peor de lo esperada, señalaron que hay que ser muy rigurosos en su atención, y subrayaron que su mayor prioridad es el bienestar de sus colaboradores.

Dadas las medidas fiscales que la mayoría de los gobiernos alrededor del mundo están tomando, México podría adoptar una postura fiscal más expansiva y tomar medidas que hagan creíble que el país tendrá una trayectoria de deuda sostenible una vez superada la crisis.

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