AMLO prohíbe la importación de cigarros electrónicos por dañar la salud de los jóvenes

Con un decreto del presidente de México, Andrés Manuel López Obrador prohibió la importación de cigarros electrónicos al mercado mexicano, con la finalidad de proteger la salud de los jóvenes.

Por el crecimiento de pacientes con padecimientos respiratorios y las muerte de jóvenes por el de cigarrillos electrónicos y dispositivos de calentamiento de tabaco se requiere de un decreto presidencial para que prohíba “el ingreso y salida del territorio nacional de dichos dispositivos”, informó el mandatario a través del Diario Oficial a de la Federación (DOF).

La decisión presidencial busca proteger la vida humana, prevenir daños a la salud en la población y obtener un medio ambiente sano para su desarrollo y bienestar, según el DOF.

En enero del 2020, la Organización Mundial de Salud (OMS) reconoció los daños asociados al uso de estos dispositivos, por lo que recomendó que “en los países donde estos productos se encuentran prohibidos continúen con dicha prohibición”.

La OMS concluyó que los riesgos sanitarios para las personas del entorno expuestas al aerosol exhalado por el uso de cigarros eléctricos es una nueva fuente de contaminación del aire por partículas, como el 1,2-propanediol, Compuestos Orgánicos Volátiles (COV) y metales pesados (como el níquel y el cromo), y la nicotina.

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En México, 938 mil adolescentes probaron alguna vez el cigarro electrónico, de los cuales 160 mil lo utilizan de manera habitual (ENCODAT 2016-2017). Ese hecho alertó al gobierno de México, porque representa la puerta de entrada de adicción a la nicotina.

El 28 de septiembre de 2019 la Secretaría de Salud dio a conocer el aviso epidemiológico por el uso de cigarrillos electrónicos o vapeo, el cual tiene el propósito identificar oportunamente la presencia de casos de enfermedad pulmonar grave posiblemente asociada con el uso de estos dispositivos.

“Es importante resaltar el inminente peligro que representan los citados dispositivos, toda vez que generan vapor o aerosol y compuestos químicos producidos por el calentamiento de los componentes del líquido, una mezcla de propilenglicol, glicerina y aromatizante o, en su caso, nicotina y tabaco”

Al ser inhaladas ingresan directamente al sistema respiratorio con una afectación más amplia que otras sustancias, tanto en vías aéreas de conducción como en zonas alveolares, debido al pequeño tamaño de las partículas generadas (100-160 nm).

Se ha reportado que la utilización de estos dispositivos genera inflamación de las vías respiratorias, el incremento de glóbulos blancos en sangre, así como opacidades bilaterales pulmonares (manchas en el pulmón), baja oxigenación de la sangre o inclusive falla respiratoria, además de un aumento de la sensibilidad de las células de las vías respiratorias a infecciones virales. 

Se prevé que su uso a largo plazo aumente el riesgo de enfermedad pulmonar obstructiva crónica y cáncer de pulmón. 

Hasta el 4 de febrero de 2020, el Centro de Control de Enfermedades y Prevención (CDC) ha registrado 2 mil 758 pacientes hospitalizados (de todos los estados de Estados Unidos) con enfermedad pulmonar grave, incluyendo 64 defunciones (provenientes de 27 estados de dicho país), asociados al uso de dispositivos de vapeo.

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