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Baja California

Los repatriados convierten a Tijuana en la capital del call center

Actualmente los call center emplean aproximadamente 30 mil personas en Tijuana, la mayoría repatriados bilingües de Estados Unidos.

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TIJUANA, Baja California. Los call center en Tijuana crecieron y se fortalecieron, gracias a la llegada de mexicanos repatriados de Estados Unidos, asegura Noé Morales, director de la empresa Empleo Nuevo.com, un portal especializado en la publicación de vacantes. 

Actualmente los call center emplean aproximadamente 30 mil personas en Tijuana, la mayoría repatriados bilingües de Estados Unidos y con “un muy buen salario” de entre 3 mil y 3 mil 500 pesos por semana.

Las compañías a menudo buscan captar entre tres o cuatro veces de personal para administrar las llamadas telefónicas de empresas estadounidenses, por lo que abordan a los connacionales repatriados a la ciudad fronteriza de Baja California, señala el directivo de Empleo Nuevo.com a Cobertura 360.

Noé Morales recuerda que desde hace muchos años comenzaron a instalarse negocios de este tipo para atender servicios de administración de las llamadas telefónicas de compañías con sede en Estados Unidos. 

México compitió por quedarse con el mercado para administrar las llamadas telefónicas de las empresas con Filipinas e India, algo que favoreció para ganar contratos fue el huso horario, expresa.

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Cuando el departamento de migración de Estados Unidos deportaba un mayor número de mexicanos se creó un módulo, cuyo personal reclutaba a los deportados en la línea fronteriza para incorporarlos a los call center.

Muchos de los repatriados llegan con una trayectoria de 25 años de residencia en Estados Unidos, otros con estudios de primaria o de secundaria. En ciertos casos, el inglés que hablan “es de barrio”, pero lo van puliendo y perfeccionando con la experiencia en los centros de trabajo.

El personal está en constante capacitación y las campañas “van y vienen”, de manera que los trabajadores deben capacitarse a propósito del nuevo producto que les toque promover o vender a través de una llamada de teléfono.

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Aunque no han llegado nuevas empresas a Tijuana, ya se convirtión en una industria que están creciendo. Algunos call center han cambiado de nombre, gracias a la fusión de sus matrices, muchas en Estados Unidos, lo que les ha dado mayor fuerza.

En Tijuana hay sobreoferta, a diferencia de lo que ocurre en el interior de la Re´pública Mexicana, en donde puede haber mucha gente bilingüe. Pero no hay tanta oferta de empleo y si la hay son salarios bajos.

“Una empresa de mil empleados, que trae una rotación del 10 por ciento mensual, nada más para mantener la capacidad operativa tiene que contratar 100 personas al mes”.

Con esta dinámica al final de cuentas el trabajador resulta mayormente beneficiado, pues le permite negociar las condiciones en materia laboral o no aceptar aquellas que estén fuera del marco de la ley.

Además puede plantear la condición de percibir un salario mayor al que haya recibido con anterioridad. Esta situación al final de cuentas le beneficia a la economía de Tijuana, así como a la de Baja California.

Los haitianos, quien hablan inglés y francés y radican en Baja California desde 2016 en Tijuana, no han integrado a trabajar  a los call center, comenta Noé Morales.

Agrega que los haitianos mezclan el francés y hablan “un idioma criollo desarrollado en su país”. En todo caso ellos se han integrado a otras áreas de trabajo, como la construcción, alimentos y limpieza de restaurantes.


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